El Consorci de la Zona Franca vira hacia la promoción de vivienda

El Consorci de la Zona Franca de Barcelona (CZFB) cierra por tercer año consecutivo un con ganancias, que en el caso de 2015 fueron de 4,5 millones de euros, una cifra alejada de las pérdidas de 12 y de 26,9 millones de euros registradas en 2011 y 2012, cuando se inició el mandato liderado por Jordi Cornet como delegado especial del Gobierno para esta institución. La plena ocupación de sus polígonos y el saneamiento de sus cuentas, hacen posible que la entidad oriente ahora su actividad hacía la promoción de viviendas a precios asequibles.

El consejo plenario del CZFB, bajo la presidencia de la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, aprobó ayer los resultados del Consorci, que ha rebajado sus gastos propios en 6,8 millones de euros gracias a medidas de ahorro, a la amortización por ventas de activos, a la disminución de trabajos externos y la bajada de la morosidad.

Jordi Cornet subrayó que la tónica de eficiencia que la entidad ha mantenido en los últimos cinco años sirve para acordar con el gobierno municipal barcelonés la promoción en el sector 10 de La Marina de dos parcelas para 144 hogares y un proyecto de vivienda social del ayuntamiento, que sumará 61 pisos de alquiler social que gestionará el Patronato Municipal de Vivienda de Barcelona.

El CZFB está volcado en el desarrollo de suelo urbano para vivienda, porque «la ocupación actual del polígono es de pleno técnico, ya que tenemos alquilada el 92% de la superficie comerciable», señaló Cornet. En diciembre, el Consorci hizo una dación en pago al Ayuntamiento de Barcelona de cuatro parcelas de equipamientos en Sant Andreu y de 44 viviendas en La Marina a cambio de que el consistorio acometiese la urbanización de los antiguos cuarteles.

La entidad pública tiene suelo para desarrollar 1.240 viviendas en La Marina, 499 sociales y 741 libres, y 551 en Sant Andreu, 69 sociales y 482 libres. Cornet ha apuntado que «durante los cien años de vida del Consorcio, siempre ha imperado el espíritu de acuerdo y concertación», refriéndose a los pactos alcanzados ahora con Ada Colau en materia de vivienda social.