El mejor verano en Barcelona
Propuestas culturales, gastronómicas y de ocio en la capital catalana
Música en vivo por doquier, tomates en los balcones , botellón en cada plaza y, como dirían los canarios, los «ñoños al aire»: el verano ya llegó. Si quedan dudas, los petardos, fuegos y el ambiente festivo de San Juan , lo confirmarán este fin de semana. Aquí algunas sugerencias para aprovechar el verano al máximo, que luego se le echará de menos.
Uno de los clásicos veraniegos no solo de Barcelona, sino de toda España, son los gazpachos y los salmorejos . Los hay clásicos, aunque también los hay innovadores, como el de remolacha, que Xavier Pellicer ha hecho casi su marca de la casa, desde Céleri, y ahora también, en el restaurante que lleva su nombre. Como Barcelona es muy de tendencias, las imitaciones no han tardado en llegar y, este año, la sopa fría de la morada hortaliza se puede encontrar en diversos locales de la ciudad. Sugerimos probar la de Encercle, un local que abrió hace tan solo unos meses en la calle Córcega, colindante con Gracia.
El sitio es perfecto para hacer el vermut en familia , desayunar con o sin prisas, cenar entre amigos o para una primera o quinta cita. El espacio es amplio, decorado con gusto y sin novedades extravagantes. Sus platos, en cambio, sí son más atrevidos, y tienen buena sazón. Sus precios no son desorbitados y su carta de vinos es muy original y didáctica. Tienen vinos de diversas latitudes y una terraza en donde poder disfrutarlos al aire libre. El servicio, distendido y amable, te hace sentir feliz de haber recalado ahí.
Ceviche peruano
A tan solo unas manzanas, otro clásico del verano de la ciudad está estrenando templo: el ceviche peruano. El chef Nicky Ramos , que se hiciera famoso en Barcelona en el restaurante The Market Perú, en Gran de Gracia, tras su cierre, acaba de abrir esta semana Leche de Tigre, su nueva aventura culinaria. Ramos es famoso por sus ceviches y uno de los embajadores de la cocina de su país en Europa. Aterriza ahora en el local que albergara en su momento al Patio Latino y posteriormente al poco exitoso Paititi , en la calle Martínez de la Rosa. Los nuevos proyectos siempre están llenos de nuevos bríos, en especial cuando el buen clima acompaña, así que toca hacerle una visita. Esa calle de Gracia está que lo peta con tanta nueva apertura. ¡Ojalá que todos sobrevivan al verano!, que el año pasado hubo más de uno que no llegó al otoño.
En casa
El verano es también una de las épocas del año en que más personas se ponen el delantal, aunque sea para hacer un discreto arroz, en compañía de la familia. Para no quedar mal con la parentela, se puede hacer uno de los divertidos cursos en el Raval en The Paella Club. Desde hace un par de años, este pequeño templo paellil se dedica a inculcarle a grupos de amigos, de trabajo, de turistas o de familias, cómo hacer un buen arroz. El ambiente es divertidísimo y la degustación del final, en donde se puede calificar cuál fue la mejor, es la cereza del pastel . El proceso, claro está, va acompañado de sendas copas de vino, para incentivar la inspiración.
Si, por otro lado, la inspiración veraniega tira más por la barbacoa o el asado, lo de hoy es probar la carne halal, que se dice será una de las protagonistas en Alimentaria 2020. Mucho conocemos sobre los cortes argentinos, además de que los hemos probado casi todos. Lo que toca ahora es visitar a Rachid, de Born Halal , en la calle Carders, y probar el amplio surtido que tiene de carne de ternera, cordero, cabrito, buey o aves, cada una de las cuales sigue un exhaustivo control de calidad y trazabilidad que no tiene igual, por lo menos en España y que permite mantener intactos los nutrientes y su sabor natural. Con Rachid también se puede uno abastecer de especias y embutidos, no por nada se ha vuelto el proveedor de varios cocineros de la zona.
En el parque
Si, después de cocinar en casa, apetece un paseo, el parque de la Ciudadela recibe a cientos de visitantes durante el verano, que le dan vida a este céntrico y bello espacio de la ciudad. Sí, ahí está el zoo , hay música callejera, buen ambiente, espacio para fiestas infantiles, parque para los pequeños, entre otras actividades lúdicas, ¡qué bien! En realidad, la razón por la que debe uno acercarse al parque no es pasear al perro, escuchar a los periquillos ni visitar el mismísimo Parlament, es nada más y nada menos que probar los mejores mojitos de la ciudad. Los preparan en el chiringuito de la fuente, el que está ubicado frente a la cascada monumental. Los chicos dominicanos que regentan el espacio preparan los mojitos con sus manos de dioses. ¡Que se pare el mundo! ¡El verano ya llegó, ojalá que dure más de lo que nos duran esos mojitos! ¡Salud!
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