Los antiguos canarios creían sagrado ser bisexual

Un estudio sostiene que era clave para generar equilibrio económico. Este concepto prehispánico formaba parte de un complejo mundo de creencias y ritos que se pueden asociar a «cultos de fertilidad»

Estatuas empleadas por aborígenes canarios que se guardan en el Museo Canario ABC

R.L.P.

Los antiguos isleños emplearían el culto a las relaciones bisexuales como herramienta para canalizar sus rituales a fin de pedir una buena agricultura y resaltar las relaciones humanas a la hora de establecer jerarquías de poder de género o «transmisión matrilineal del poder».

Los arqueológos Julio Cuenca y José de León , en su estudio «Una escultura bisexuada procedente de La Aldea de San Nicolás, Gran Canaria», publicada por el Museo Canario , señalan que la agrupación de restos arqueológicos dispersos por la isla, ha permitido impulsar el conocimiento sobre la cultura sexual de los antiguos canarios .

Estos prestigiosos expertos son los mismos que apuntan que en el Monumento de Risco Caído , que la Unesco está analizando a efectos de declararlo Patrimonio Mundial de la Humanidad, hay dibujos donde se rinde culto a la sexualidad .

El informe de Cuenca y De León forma parte de los archivos del Museo Canario. El documento, al que ha tenido acceso ABC, señala que el hallazgo «representa una prueba definitiva sobre la existencia de primitivos cultos relacionados con seres andróginos o bisexuales » porque «la figurilla bisexuada de La Aldea podría ser un claro ejemplo de un supuesto rito en demanda del incremento de la fertilidad », que «se vería robustecido cuando se combinan los dos órganos sexuales ».

«Andróginos»

Y es que la estatua que delataría esa adoración de los antiguos canarios por mitificar las relaciones sexuales «andrógina» se detectó cuando fue a ser inventariada una serie de esculturas de colecciones particulares, «de las cuales teníamos vagas referencias a través de algunas publicaciones e informes orales».

En el texto de la investigación , al que tenido acceso ABC, Cuenca y De León detallan que «tuvimos la fortuna de encontrar cuatro nuevas esculturas cerámicas que se hallaban en poder de particulares, las cuales habían sido descubiertas de forma casual hacía varios años, pero que, sin embargo, eran todavía desconocidas para la ciencia», afirman los autores del estudio.

La simbología sexual del aborigen canario no deja de generar sorpresas a los investigadoress

La escultura «bisexuada» , que así la definen los arqueólogos, fue descubierta en la finca de Tirma por el guarda forestal de aquella propiedad, que mostró «estos importantes hallazgos» con motivo de una prospección arqueológica. Tirma forma parte del entorno donde se sostiene la existencia de restos arqueológicos que serían sagrados para los antiguos canarios.

Las estatuas están en poder del Museo Canario porque fueron cedidas. Una cuarta escultura fue encontrada por Francisco Ossorio Acevedo en una playa de La Aldea de San Nicolás. La noticia de la existencia, de acuerdo con el contenido de la investigación, la dio «el doctor Martín de Guzmán , quien había sido testigo presencial del fortuito descubrimiento». Ossorio sería familiar de Martín de Guzmán.

«Pene erecto»

«Contactamos con el señor Ossorio Acevedo, quien después de escuchar nuestras justas peticiones hizo entrega desinteresadamente de la escultura al Museo Canario», apuntan los estudiosos, fucionarios del Servicio de Patrimonio Histórico del Cabildo de Gran Canaria. La pieza encontrada es «e xcepcional entre todas las conocidas , fundamentalmente por su carácter bisexual».

La figurilla estudiada por Cuenca y De León es de barro cocido, mide 5,5 centímetros de altura en su eje mayor y dos centímetros en el eje menor, siendo su peso 37 gramos .

Y relatan los expertos: «prácticamente le falta toda la parte superior correspondiente a la cabeza y extremidades superiores» aunque «conserva, asimismo, una parte del tronco, así como también la extremidad inferior derecha y el arranque de la extremidad izquierda; entre ambas sobresale lo que interpretamos como un pene erecto, exageradamente representado en relación con las extremidades».

Los investigadores señalan que «esta figurilla debe asociarse» a un contexto arqueológico formado por «estructuras habitacionales y tumulares de piedra seca, concretamente el gran poblado de Los Caserones», que se extendía por toda la margen derecha de la desembocadura del barranco de La Aldea, Gran Canaria . «La estatua estudiada por Cuenca y De León presenta una « postura sedente con una cierta inclinación hacia atrás».

«Rasgos bestiales»

En su descripción, los autores señalan que «las extremidades inferiores y el pene están decorados a base de incisiones que han sido rellenadas con pintura blanca» y agregan que «el torso, por el contrario, presenta una decoración más característica en este tipo de figurillas, a base de un baño de almagre , aunque con mayor intensidad en el espacio interior del triángulo equilátero ».

Los arqueólogos afirman que la escultura representa «un ser extraño, de rasgos más bestiales que humanos , sobre todo en lo referente a la parte inferior, con extremidades robustas y arqueadas, cubiertas de vello , que terminan en lo que parece representar una garra» aunque «pudiera tratarse de una criatura fantástica, mitad humana, mitad animal».

A esta conclusión se llega por figurillas en barro cocido «de características parecidas han sido descubiertas en los yacimientos arqueológicos de Tara, El Pajar, Caserones, en Gran Canaria».

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación