Ferrocarril

Otra avería en el tren de Teruel pone en evidencia la penosa situación de la línea: estuvo ocho horas cortada

Se vieron afectadas cuatro conexiones ferroviarias de viajeros entre Zaragoza y Valencia

Imagen de la desangelada línea férrea Zaragoza-Teruel-Sagunto, a su paso por la capital turolense F. Simón

R. P.

Otra avería sufrida por un tren de mercancías que circulaba por la línea Zaragoza-Teruel-Sagunto (Valencia) ha puesto en evidencia, una vez más, la penosa situación de este trazado. El incidente ocurrió este domingo y dejó totalmente cortada la línea férrea durante ocho horas. Se vieron afectadas cuatro conexiones ferroviarias de viajeros que estaban programadas entre Zaragoza, Teruel y Valencia. Hubo que habilitar transbordos por carretera para sortear el tramo que quedó inutilizado por la avería.

La incidencia la protagonizó un convoy de transporte de coches, que regresaba sin carga desde Sagunto hacia Zaragoza. En pleno trazado se quedó varada la plataforma, y tuvieron que pasar ocho horas hasta que otra locomotora acudiera a remolcar el convoy y liberar la línea, que es de vía única y sin electrificar.

El trazado quedó cortado al tráfico ferroviario a las 7.42 horas de la mañana del domingo, y pilló en plena ruta a un tren que había salido de la estación de Zaragoza veinte minutos después de que se produjera el incidente. Obligó a transbordar a los viajeros aentre Navarrete y Teruel, que era el tramo en el que había quedado varado el mercancías. Los viajeros fueron llevados por carretera entre Navarrete y Teruel, donde otro tren completó ese servicio hasta Valencia -en total acumuló un retraso de 109 minutos-.

Fue uno de los cuatro trenes de viajeros que sufrieron de lleno el corte de esta línea férrea, que lleva décadas esperando su modernización para que resulte competitiva.

Este trazado acumula todos los años decenas de incidentes que provocan retrasos en los trenes que circulan por esta línea. Eso sin contar con que, de por sí, las precarias condiciones técnicas de este trazado hace que los tiempos de recorrido sean muy elevados.

En 2018, por ejemplo, la línea Zaragoza-Teruel-Valencia acumuló 28 retrasos de más de media hora por incidencias imputables a Renfe. En 2017 se produjeron 41, y 35 en 2016.

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