«Es más difícil encontrar un empleo que crearse uno»

En Aragón hay 105.708 afiliados al Régimen Especial de Trabajadores Autónomos, de los que un 38 por ciento son personas físicas, frente a un 62 por ciento que son societarios. La crisis se ha llevado por delante a muchos de ellos, basta con comparar las cifras de hace unos años. Cuando comenzó la crisis, en la Comunidad había en torno a 116.000 trabajadores autónomos, que descendieron a 102.000 a finales de diciembre del 2013. A día de hoy hay registrados más de 105.000.

Estas son algunas de las conclusiones del informe realizado por la Asociación de Trabajadores Autónomos de Aragón. Un estudio que refleja cómo ha evolucionado este sector en los últimos cuatro años y que deja tres conclusiones relevantes: el perfil de los autónomos casi no ha cambiado con la crisis, se han perdido casi 11.000 afiliados al Régimes Especial de Trabajadores Autónomos, pero los que quedan contratan más.

La encargada de presentar estas conclusiones es la presidenta de esta organización, Mayte Mazuelas. Hablamos con ella para que nos haga una radiografía del sector y sus trabajadores.

—¿Cómo se encuentra en estos momentos el sector de los autónomos?

—La fotografía actual es muy positiva, ya que el 75 por ciento de los autonómos en Aragón lleva más de tres años trabajando como tal, lo que demuestra la estabilidad del sector. Hay veces que es más difícil encontrar un empleo que crearse uno por cuenta propia. Eso sí, hay que trabajar muchas horas, es muy sacrificado.

—¿Cuál es el perfil de estos trabajadores?

—Varón, español, de 40 años, que trabaja principalmente en el sector servicios. En estos momentos, el 67,7 por ciento de los autónomos son hombres; un 93,8 por ciento del total son españoles y la mayor parte tienen 40 años o están por encima. El 25 por ciento de los autónomos son menores de 30 años, una cifra que ha aumentado en los últimos años. La mayor parte de los autónomos trabajan en el sector servicios y un 24,8 lo hacen en la agricultura. Todos ellos son personas muy formadas e informadas, que cuentan con un plan de viabilidad y que en la mayoría de los casos estudian mucho el negocio a montar y dónde hacerlo.

—¿Ha cambiado mucho el perfil de los autónomos con la crisis?

—No ha cambiado mucho, pero sí estamos notando que cada vez hay más gente joven. Cabe destacar, por ejemplo, que en las provincias de Huesca y Teruel la agricultura puja con fuerza entre los jóvenes autónomos. Esto puede ser debido a un cambio generacional o a que las nuevas generaciones están apostando por la vuelta al campo como salida a la crisis.

—¿Qué papel están jugando los trabajadores autónomos en la recuperación económica?

—Están siendo protagonistas en la recuperación de la economía, tanto en Aragón como a nievl nacional. Están demostrando responsabilidad, valentía y esfuerzo y eso se traduce en cifras positivas. En cuatro años, en Aragón los autónomos han creado 5.35o empleos netos. Esto demuestra que están creando su propio trabajo pero además están contratando. De hecho, cada vez hay más autónomos que contratan personal. Si les van las cosas bien es un sector que enseguida genera nuevos contratos, empleos de calidad y de proximidad. En diciembre de 2011 había 9.653 autónomos con empleados, en septiembre de 2015 la cifra ha aumentado hasta los 11.324. Y eso que la crisis económica se ha llevado por delante muchos autónomos. En 2011 había 60.615 y en septiembre de este año 54.212. Somos menos, pero los que hay están contratando más, síntoma de que las cosas les van bien.

—¿Qué medidas deben de tomar las administraciones públicas para impulsar este sector?

—Por ejemplo, proponemos crear un buzón anónimos para que se pueda denunciar a quienes incumplen la ley, a los morosos, a los que trabajan en la economía sumergida o hacen competencia desleal. Esto nos facilitaría las cosas y no cuesta mucho dinero. También proponemos que la tarifa plana pase de seis meses a doce, de esya forma se fomentaría el trabajo autónomo. Otra de las medidas es que se incentive a los que contraten y que se pongan en marcha rebajas fiscales. Por ejemplo, a las peluquerías se les subió el IVA de un 7 a un 21 por ciento y creemos que ya ha llegado el momento de que los impuesto vayan a menos. Esto y mucho más es lo que queremos proponer y debatir con los representantes políticos que nos quieran escuchar.