Rajoy tendrá el apoyo de Trump en la Casa Blanca cinco días antes del 1-O
En un almuerzo de trabajo reforzarán la alianza de España y Estados Unidos
Donald Trump recibirá a Mariano Rajoy en la Casa Blanca el próximo día 26, según anunció ayer el ministro portavoz del Gobierno, Íñigo Méndez de Vigo , en la rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Ministros.
El encuentro entre el presidente de Estados Unidos y el jefe del Ejecutivo, que fue avanzado el 4 de agosto por ABC, se producirá sólo cinco días antes del 1 de octubre, la fecha apuntada por la Generalitat de Cataluña para llevar a cabo el ilegal referéndum independentista, por lo que no es descartable que, con motivo de la reunión en el Despacho Oval, haya algún pronunciamiento sobre ese asunto.
En cualquier caso, en medios gubernamentales se pone de relieve el hecho de que, mientras algunos se afanan en llevar a cabo movimientos secesionistas , el Gobierno se preocupa de estrechar lazos con aliados de la importancia de Estados Unidos. La invitación de Trump se considera una muestra de apoyo al peso internacional de España en este momento.
Rajoy llegará el lunes, día 25, a Washington, y se alojará en la residencia de Blair House, situada frente a la Casa Blanca, y donde se hospedan, tradicionalmente, los altos mandatarios en visita oficial a Estados Unidos. En principio, en la agenda del presidente del Gobierno durante su estancia en Washington, solo figura hasta ahora, la reunión con Trump, que el día 26 le ofrecerá un almuerzo en la Casa Blanca.
Será la primera entrevista formal entre los dos mandatarios, que ya tuvieron ocasión de saludarse brevemente el pasado 25 de mayo, en Bruselas, donde participaban en la Cumbre de la Alianza Atlántica, y después, en julio, en Hamburgo, durante la Cumbre del G-20.
Garantizar la seguridad
En el encuentro de Bruselas, intercambiaron unas breves palabras y el presidente del Gobierno publicó en su cuenta de Twitter una fotografía del momento, subrayando que «Estados Unidos y España colaboran para garantizar la seguridad y el bienestar». Poco más trascendió de aquella breve conversación, que había estado precedida de al menos dos charlas telefónicas: la primera el 12 de diciembre de 2016, cuando Trump aún no había asumido su cargo; y la segunda, el pasado 7 de febrero. En ambas, según fuentes gubernamentales españolas, el tono de la conversación fue muy cordial y en la última el presidente de Estados Unidos cerró la charla con un «Te espero en Washington».
En los últimos meses, los equipos de los dos presidentes han trabajado para encontrar una fecha en la que Trump pudiera recibir a Rajoy en la Casa Blanca, por la que ya han pasado los principales dirigentes europeos , como la alemana Angela Merkel , la británica Theresa May o el italiano Paolo Gentiloni . No así el francés Emmanuel Macron , elegido presidente el pasado mes de mayo y que invitó a Trump a estar presente en los actos del 14 de julio pasado en París.
Las conversaciones que los equipos de los dos Gobiernos mantuvieron en los últimos meses se aceleraron, después de que en junio el ministro de Exteriores, Alfonso Dastis , se entrevistará en Washington con el secretario de Estado estadounidense, Rex Tillerson , y se anunciara que se trabajaba para un posible encuentro en otoño.
Obama tardó más
En cualquier caso, Trump habrá tardado menos en recibir a Rajoy que su antecesor, Barack Obama , quien dejó pasar más de dos años para reunirse con él en la Casa Blanca y lo hizo en enero de 2014. Aún así, Obama no dudó en elogiar los esfuerzos hechos por el Gobierno de Rajoy para sacar a España de la crisis y los logros económicos alcanzados, algo que plasmó después cuando en noviembre de 2015 durante una cumbre del G-20 en Turquía le saludó con un expresivo «¡Cómo han cambiado las cosas en su país!».
El almuerzo que mantendrán en la Casa Blanca permitirá a Trump y Rajoy analizar asuntos relacionados con la lucha contra el terrorismo, las relaciones bilaterales y las relaciones con la Unión Europea, según indicó ayer Méndez de Vigo. No obstante, es muy probable que se aborde la crisis con Corea del Norte, que es uno de los asuntos que más preocupa a Washington en estos momentos y en el que cuenta con el pleno respaldo español.
Además, es seguro que en la conversación estarán presentes otros contenciosos como el de Venezuela, en el que la Administración Trump tiene interés en escuchar la opinión de España.
Aliados sólidos
Mariano Rajoy reiterará, sin duda, la disposición de España a seguir siendo un sólido aliado de Estados Unidos, a quien desde hace años facilita el uso de la base naval de Rota para los cuatro destructores del denominado «escudo antimisiles» de la OTAN y de la base de Morón de la Frontera, donde los «marines» estadounidenses despliegan una unidad de acción rápida ante una hipotética crisis en África.
Hay cierto interés en saber de qué manera se referirá Donald Trump a la situación de España, tras los peores años de la crisis y en pleno desafío independentista. Cuando Rajoy estuvo en enero de 2014 en la Casa Blanca con Obama , éste no hizo ningún tipo de pronunciamiento sobre el desafío separatista, pero en la visita que hizo a Madrid, en septiembre de 2015, trasladó su compromiso con una España «fuerte y unida».
El Gobierno valora el contraste «significativo» que se producirá en vísperas del pretendido referéndum ilegal, entre un Ejecutivo que ha ganado peso en el escenario internacional frente a los separatistas, que no han logrado recabar un solo apoyo de nivel fuera de España.
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