El Gobierno crea un gabinete de afines en la cúpula del CIS para redoblar su control político
Tezanos colocará asistentes de confianza para no tener que depender de funcionarios de carrera en tareas «sensibles»
El Gobierno acaba de dar una vuelta de tuerca más para reforzar su control político sobre el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) , coincidiendo con la decadencia electoral de la izquierda y el auge del PP . Ha aprobado una reforma legal que modifica la plantilla de ese organismo para crear un gabinete de afines en la cúpula del CIS, al servicio directo de la presidencia y para desempeñar tareas «sensibles».
Ese gabinete pasa a estar dotado con cuatro plazas de nueva creación, que serán cubiertas discrecionalmente por el presidente del CIS, actualmente el socialista José Félix Tezanos .
Aunque el CIS es un organismo que depende orgánicamente del Ministerio de la Presidencia, la normativa que lo regula proclama que su actuación ha de guiarse por los principios del rigor técnico, la «objetividad, neutralidad e imparcialidad». Sin embargo, está en el punto de mira desde que Tezanos, declarado ‘sanchista’ , fue colocado por el Gobierno para dirigir este organismo del que dependen los barómetros oficiales que miden parámetros como la intención de voto, las preferencias políticas de los españoles o la valoración que los ciudadanos dan al propio Ejecutivo y a los líderes de los partidos.
El decreto y el libro de elogio a Sánchez
Cuestionado por su partidismo y acusado por la oposición de manipular sondeos oficiales, esta suerte de guardia pretoriana que el Gobierno regala ahora a Tezanos le llega escasas horas después de la presentación pública de su nuevo libro titulado ‘Pedro Sánchez. Había partido: de las primarias a La Moncloa’ .
Este acto, que se convirtió en una loa del sanchismo tras el batacazo del PSOE en las elecciones andaluzas , tuvo lugar ayer martes en Madrid y en él se dieron citas rostros de primera línea del socialismo gobernante como la número dos del PSOE, Adriana Lastra , o los ministros Carolina Darias, Miquel Iceta y Félix Bolaños . Y precisamente es este último, Bolaños, quien como ministro de la Presidencia firma el decreto de reforma del CIS que crea el nuevo gabinete de afines para reforzar el control político del organismo. Lo publica hoy el BOE y entra en vigor mañana jueves. El martes le dio el visto bueno el Consejo de Ministros, en plena resaca por la aplastante victoria del PP en Andalucía y la debacle de los socialistas en el que había sido su histórico feudo.
Datos «sensibles»
El decreto firmado por Bolaños justifica la creación de esta suerte de brigada de afines en la cúpula del CIS por la necesidad –reza el documento– de incorporar personas que realicen «labores de confianza y asesoramiento especial de manera permanente e inmediata con la presidencia del centro».
Dice el decreto de Bolaños que «estas funciones se hacen necesarias» por «la sensibilidad y creciente complejidad de los datos obtenidos y analizados por parte del organismo, y del aumento del caudal de trabajo de superior decisión, así como consecuencia de la función esencial que tiene encomendada el CIS de realizar análisis de datos sensibles que sirvan para el asesoramiento de la Administración y Gobierno» .
Los funcionarios de carrera, al margen
A partir de ahora, para materias especialmente «sensibles», Tezanos o quien le suceda en el cargo ya no tendrá que depender de los empleados públicos de carrera que tienen plaza en este organismo, como ha ocurrido hasta ahora. Podrá esquivar a los funcionarios mediante el fichaje, libre y discrecional, de personas de confianza sin ninguna cortapisa de formación, titulación o bagaje profesional en este campo.
Ha sido denominada ‘unidad de apoyo’ del presidente del CIS y los Presupuestos Generales del Estado que están en vigor no la previeron. No se consignó partida al efecto en las cuentas del CIS de este 2022, así que el nombramiento de esos afines en la cúpula del organismo requerirá de una modificación presupuestaria.
Hasta ahora en el CIS no había personal eventual de designación política , no había más puestos a dedo gubernamental que el del director. El resto es personal público de carrera, plantilla en la que abundan los perfiles de alta cualificación.
El vigente presupuesto del CIS cifra los gastos de personal de este organismo en 1,8 millones de euros , entre sueldos y cotizaciones a la Seguridad Social. A eso habrá que sumarle ahora el coste de los cuatro afines que integrarán ese nuevo equipo. Entre las funciones que tendrán encomendadas al servicio del presidente del CIS figuran las de «asesoría política, asistencia personal inmediata, asesoría de prensa y comunicación en un ámbito con cada vez mayor exposición», reza el decreto de Bolaños que acaba de promulgarse.
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