Los fugados de la ‘patera aérea’ de Palma se amotinaron dentro del avión

El grupo de jóvenes increpó a la tripulación y pidió salir a fumar mientras atendían al supuesto enfermo pero el comandante no lo autorizó

La jueza que dictó prisión para los 12 detenidos cree que todo fue premeditado, entre otras cosas, porque sólo uno de los 12 detenidos había facturado equipaje

Los detenidos pasaron a disposición judicial el pasado lunes Alberto Vera

Mayte Amorós

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Un motín provocado propició la fuga de los 24 pasajeros de la ‘patera aérea’ el pasado viernes en el aeropuerto de Palma. La aeronave de Air Arabia Maroc con destino Turquía desde Casablanca hizo una escala de emergencia en Son Sant Joan para atender a uno de los detenidos, que supuestamente fingió un coma diabético. Según informa Última Hora, tras el desalojo del falso pasajero enfermo, la tensión creció dentro de la aeronave hasta el punto de que un grupo de jóvenes empezó a increpar a la tripulación reclamando salir a fumar «a las pistas» . Uno de ellos forzó la puerta de emergencia y fue cambiado de sitio. Finalmente, se escaparon a empujones del avión, arremetiendo contra una de las personas de coordinación que intentó en vano frenarlos. «Hubo caos y agresividad», según la magistrada Rosa Mas, que envió a prisión este martes a los 12 detenidos por la fuga del avión de Air Arabia Maroc, que obligó al cierre del aeropuerto de Son Sant Joan durante cuatro horas.

Los 24 marroquíes fugados aprovecharon la falta de vigilancia de la aeronave para generar «un importante altercado» dentro de ella e «increpar e intimidar a la tripulación», detalla el auto de la jueza Rosa Mas recogido por el diario local. La magistrada explica que el comandante no autorizó la salida, y que la tripulación de cabina no cerró las puertas del avión porque «temía por su integridad física», puesto que algunos pasajeros se encontraban «muy nerviosos».

En su resolución, la jueza considera que hay suficientes indicios de que se trata de un grupo «medianamente organizado» y de que la acción fue premeditada . Insiste en que «supuso un caos en el aeropuerto por un incidente provocado y organizado, sin precedentes en el espacio aéreo europeo y de dimensiones internacionales, dándose eco prensa de todo el mundo de los hechos sucedidos y poniendo en entredicho la seguridad del espacio aéreo».

Además, afirma que «se opusieron frontalmente al cumplimiento de las órdenes que les dieron el comandante y el coordinador de vuelo» y que «un situación hostil e intimidatoria» y ejercieron «coacciones graves» sobre el comandante, la tripulación y el resto del pasaje . En el vuelo viajaban otras 120 personas. De ellas, veinte decidieron no continuar el trayecto y se quedaron en Palma. El resto viajó de regreso a Casablanca y no a Estambul, que era su destino.

Uno de los indicios que incitan a pensar que el aterrizaje de emergencia estaba orquestado, tal y como pensaba la Policía, es que sólo uno de los pasajeros fugados facturara equipaje en Casablanca; los 23 restantes sólo llevaran equipaje de mano, básicamente mochilas. A la vista de estas pruebas, la jueza concluye que se trató de una fuga premeditada. «Resulta evidente que el comportamiento de los pasajeros que huyeron de manera inmediata tras la llegada del equipo de emergencia carece de sentido si no se relaciona con un plan previo», subraya.

Otro de los indicios que apuntan a que todo estaba planeado es la existencia de un grupo de Facebook llamado ‘Brooklyn’, en el que ya en el mes de julio se daban instrucciones para provocar un incidente calcado al ocurrido en Palma. La investigación confirmó que varios de los detenidos forman parte de esta página marroquí en la que ya en julio se buscaban voluntarios para materializar una entrada ilegal por avión en un vuelo a Turquía, fingiendo una falsa indisposición con el objetivo de entrar ilegalmente en la Unión Europea. «Chicos, escuchad, la mayoría quiere emigrar. Sigan este plan: necesitamos 40 voluntarios. Todos los chicos de Brooklyn que reserven en un avión rumbo a Turquía y que sobrevuele España», reclamaba el pasado mes de julio el usuario con las siglas Y.S., un joven de Casablanca que ejerce como administrador del grupo.

Tras el aterrizaje de emergencia, uno de los fugados hizo una publicación en esta página. «Todavía estoy mareado en España. La policía nos persigue en el bosque y dispara contra nosotros con balas de goma. Mi teléfono está a punto de apagarse, tengo un uno por ciento de batería...». El domingo se borraron las publicaciones.

La magistrada envió a prisión a los 12 detenidos por el riesgo de fuga ante las elevadas penas de los delitos, que podrían alcanzar los 13 años de cárcel. Les imputan dos tipos diferentes de sedición, coacciones y de favorecimiento de la inmigración ilegal.

Mientras tanto, la Policía y la Guardia Civil siguen buscando a la otra docena de jóvenes que salieron corriendo del avión de Air Arabia Maroc y huyeron por las pistas del aeródromo palmesano. Dada la situación, Aena decidió paralizar la operativa de Son Sant Joan durante cuatro horas hasta que al filo de la medianoche volvieron a salir y entrar aviones en Mallorca. El cierre afectó a cerca de 60 aviones que tuvieron que ser retrasados o desviados a otros aeropuertos.

Una ambulancia trasladó al supuesto enfermo hasta el hospital de Son Llàtzer, donde los médicos de Urgencias certificaron que se encontraba en perfecto estado. El investigado, el único imputado también por inmigración ilegal, aseguró que es diabético. La jueza cree que fingió el ataque o bien se lo provocó para facilitar la fuga. Se trata de un marroquí de 32 años que tenía antecedentes policiales en España después de ser detenido en 2020 en Marbella por delitos contra el patrimonio y resistencia a la autoridad. Esa noche del viernes quedó ingresado en el hospital bajo custodia. El otro pasajero que lo acompañó hasta el centro médico huyó en un descuido aunque fue detenido poco después. La misma suerte corrieron otros diez pasajeros fugados, que fueron apresados en la calle Manacor, de Palma; Sa Cabaneta y Es Figueral, en Marratxí; y en las inmediaciones del aeropuerto de Son Sant Joan.

La Policía ha confirmado que al menos dos jóvenes marroquíes fugados han abandonado la isla. Ambos sacaron un pasaje de barco con destino a Barcelona. La Policía dictó una requisitoria sobre la docena de fugados. También el juez emitió una orden de busca y captura, ya que los fugitivos están plenamente identificados.

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