Así ejecutaba Manos Limpias los planes de Ausbanc

Las relaciones entre Luis Pineda y Miguel Bernad, líderes de Ausbanc y Manos Limpias respectivamente, ambos encarcelados, comenzaron con el llamado caso Blesa, una causa contra el expresidente de Caja Madrid por la venta un banco americano que le llevó a prisión un tiempo a pesar de estar ahora archivada.

Desde entonces, los responsables de Manos Limpias y Ausbanc fueron de la mano al servicio de la trama de extorsión que creó Pineda, el cabecilla total del entramado, quien tenía atemorizados a los empleados de Ausbanc, según han declarado ante el juez algunos de los implicados, a quienes podía bajar el sueldo o despedir.

El juez Santiago Pedraz relata, en el auto en el que obliga a comparecer en el juzgado a ocho investigados, diversos casos en los que Manos Limpias actuó como brazo ejecutor de los planes de extorsión ideados por el líder de Ausbanc, aprovechando la omnipresencia como acusación del supuesto sindicato.

El ejemplo más ilustrativo es la acusación contra el presidente de Unicaja, Braulio Medel, en el caso de los ERE fraudulentos de la Junta de Andalucía, en el que Pineda negoció y preparó la retirada de la acusación contra Medel a cambio del pago de un millón de euros. En una conversación telefónica pinchada, un empleado de Ausbanc le comenta a otro que Pineda no puede viajar a Venezuela porque tiene que estar en Sevilla para «estar encima del abogado de Manos Limpias» en el caso de Unicaja, porque si no «te la juega».

En otra conversación, Bernad le explica a otra persona de la trama de extorsion que quienes están personados en la causa de las llamadas tarjetas black de Caja Madrid y Bankia es Manos Limpias a través de Ausbanc, de lo que se puede deducir que el secretario general de Manos Limpias conocía que Ausbanc utilizaba al supuesto sindicato «para ejercer presión a entidades», asegura el juez.

Otro servicio mutuo entre ambas asociaciones, que enarbolaron la bandera de la defensa de los usuarios y ciudadanos, llegó en una supuesta extorsión a Banco Sabadell. Tanto Pineda como Bernad duermen en prisión, investigados por la Audiencia Nacional.