«Hay demanda de más España»
En su último informe, el Real Instituto Elcano insiste en que el país debe asumir mayor protagonismo, tanto a nivel europeo como global, en un panorama internacional repleto de desafíos, como el Brexit o Venezuela
El Brexit, Venezuela o el auge de los populismos a nivel internacional. Son numerosos los desafíos que ahora mismo presenta la política exterior para España en un momento en el que, paradójicamente, el escenario interno se antoja cuando menos complejo e imprevisible. Pese a ello, el Real Instituto Elcano considera que España debe acometer estos desafíos dando un paso adelante.
«Hay demanda de más España, tanto en el escenario europeo como global». De esta forma tan clara ha manifestado esta idea Ignacio Molina , coordinador del informe titulado «España en el mundo en 2019: perspectivas y desafíos», presentado hoy en Madrid y con el que el Real Instituto Elcano realiza una prospectiva sobre el papel que el país debe jugar en un tablero internacional cada vez más complejo.
«España es un estado que tiene que asumir que es más grande que lo que muchas veces piensa la opinión pública», ha insistido Molina, quien también ha animado a los encargados de la política exterior española a «tomar más responsabilidades» en el marco de la Unión Europea (UE), donde ganan poder algunos gobiernos no europeístas y donde Francia y Alemania, líderes tradicionales de la política comunitaria, han mostrado signos de debilidad y «necesitan el refuerzo de otros países».
El impacto del «procés»
En la presentación del informe, moderada por el director del Instituto, Charles Powell , y en la que han estado presentes otros tres investigadores principales de este trabajo. - Federico Steinberg, Lara Lázaro, Iliana Olivié - también se han abordado otros retos a corto plazo para la política exterior española. Como ha desgranado Molina, estos desafíos a corto plazo para España son básicamente cuatro: los retos a los que se enfrenta Europa -como el Brexit-, la apuesta por el multilateralismo, la gestión migratoria y la gestión de la imagen exterior en el escenario del conflicto catalán.
En este sentido, Molina ha confirmado que el problema en Cataluña, que estos días ha vuelto a ganar vigencia con motivo del juicio al «procés» no beneficia a la política exterior de España, ya que «consume energías» a la tarea diplomática y también perjudica a la imagen de España en el exterior, «aunque, eso sí, no demasiado».
