JUAN JOSÉ GONZÁLEZ RIVAS, PRESIDENTE DEL TRIBUNAL CONSTITUCIONAL
«La Constitución no se para con el estado de alarma, todo lo contrario»
Ensalza el civismo ejemplar de los ciudadanos y asegura que España y sus instituciones tienen fortaleza suficiente como para superar la crisis sanitaria por el coronavirus
En pleno estado de alarma, el presidente del Tribunal Constitucional reivindica la vigencia de la Carta Magna y se muestra optimista con el desenlace de la crisis sanitaria.
¿Cómo está afrontando la crisis del coronavirus?
Con mucha preocupación por la situación tan dramática a la que nos está llevando esta pandemia, que indudablemente está alcanzando un resultado de fallecimientos que nunca nos podíamos imaginar. Asimismo estoy con mucha serenidad y confianza en las autoridades , en los sanitarios, en las fuerzas de seguridad del Estado y en todos los ciudadanos que se están esforzando día a día en mitigar los efectos de esta crisis sanitaria. Estoy seguro de que saldremos adelante.
¿Conoce a alguien de su entorno que haya dado positivo o que haya tenido que guardar cuarentena por haber estado en contacto con un positivo? ¿Es su caso?
Hace unos días hemos recibido la buena noticia de un funcionario del Tribunal que, estando de baja por otra patología durante un par de semanas había dado positivo en el coronavirus, ya ha recibido el alta hospitalaria y se encuentra en casa.
Asimismo y al igual que el resto de españoles, observo con inquietud cómo amigos y familiares pueden estar expuestos al virus. Por fortuna, tanto mis allegados como yo, de momento, estamos bien.
¿Cuál es su rutina diaria? Cuénteme cómo es un día de su «nueva» vida tras el estado de alarma. ¿Está teletrabajando?
Evidentemente, la declaración de estado de alarma ha modificado relativamente el día a día en mi actividad profesional. Sigo acudiendo al Tribunal Constitucional para atender las diversas incidencias y la actividad de la Institución. Me refiero a la presentación de recursos de amparo por vía telemática. A diario despacho con el Secretario General y los Jefes de Gabinete y de Prensa, estando informado por estos del personal que cubre los servicios mínimos del Tribunal.
Luego al mediodía regreso a casa para comer y estar con la familia. Y por la tarde continúo desde casa mediante el teletrabajo estudiando recursos, informes, etcétera. Al finalizar mi jornada de trabajo suelo ver un rato los informativos de televisión para seguir con atención la actualidad de la crisis sanitaria.
¿Está preparada España para afrontar esta crisis? ¿Cree que se pudo prever después de los contagios de China?
Como le decía anteriormente, tengo mucha confianza en el personal sanitario de este país, porque estoy convencido de que tenemos uno de los mejores sistemas de salud del mundo, precisamente por ser unos excelentes profesionales en todos los ámbitos en que desarrollan su actividad. Sient o un gran reconocimiento personal para todas aquellas personas que siguen acudiendo a sus puestos de trabajo en las farmacias, supermercados, fuerzas y cuerpos de seguridad, personal de limpieza, etc, para luchar contra el virus. Asimismo, quiero subrayar que España es un Estado social y democrático de Derecho consolidado y fuerte, donde los poderes públicos, junto con la Monarquía, están capacitados para responder de forma eficaz a esta situación.
Por otra parte, lo que hubiera podido hacerse no tiene sentido suscitarlo en este momento, donde la prioridad máxima es salir cuanto antes de esta gravísima crisis sanitaria con el menor número de fallecidos.
¿Qué papel juega el TC en estos momentos, durante el estado de alarma? ¿Está celebrando plenos?
En el Tribunal Constitucional, a pesar de que no se ha interrumpido la actividad, hemos suspendido los plazos administrativos y procesales, por Acuerdo del Pleno del 16 de marzo, en aplicación del Real Decreto 463/2020, que declara el estado de alarma. Además, el martes 10 de marzo suspendimos los plenos jurisdiccionales del miércoles y jueves de esa semana y se redujo al mínimo los servicios presenciales, con el fin proteger la salud de todo el personal dependiente de la institución.
Desde los primeros momentos, quisimos reducir al máximo los riesgos de nuestro personal. Por lo que nos encontramos en una situación de «servicios mínimos», que permiten mantener el funcionamiento de este órgano constitucional, pero al mismo tiempo velar por la salud de todos los profesionales que lo integran.
El Tribunal continuará dictando resoluciones y medidas cautelares que fueran necesarias , en aquellos procesos constitucionales que lo requieran, en garantía del sistema constitucional y de los derechos fundamentales y libertades públicas, contando para ello con las previsiones telemáticas que sean necesarias.
Este órgano constitucional no se puede paralizar, porque nuestra Constitución tampoco se encuentra paralizada ni ha perdido su vigencia con el estado de alarma, sino todo lo contrario.
Cuando todo esto acabe ¿Cree que el TC retomará su trabajo con normalidad o con asuntos pendientes?
Sin duda alguna, el Tribunal recuperará su actividad profesional ordinaria tan pronto como sea posible y continuará dando respuesta a todos los recursos, demandas y cuestiones pendientes y a las nuevas presentadas, con la mayor dedicación y esfuerzo que sea necesario, como viene siendo habitual en su quehacer diario y en circunstancias normales.
¿Qué mensaje mandaría como presidente del TC a la ciudadanía?
En estas circunstancias tan difíciles quiero transmitir un mensaje de serenidad, paciencia y fortaleza, porque estoy plenamente convencido de que superaremos esta situación. Es muy importante obedecer las indicaciones y consejos de las autoridades, especialmente de las sanitarias, para evitar que el contagio del virus se incremente. Estamos inmersos en unos momentos complicados que tenemos que afrontar con una gran esperanza, sabiendo que se ganará la batalla final al Covid-19.
El pueblo español tiene grandes cualidades y las está demostrando en el día a día. España es un gran país que ha dado –y está dando- muestras solidarias y de una conducta cívica ejemplar para superar situaciones complicadas como las que vivimos actualmente.
[Inserte: componente-story-top-ten]
