El instructor de la Púnica pide un juez de apoyo por la complejidad de sus 47 casos

El juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco, que instruye la gigantesca causa de la trama Púnica, ha solicitado un juez de apoyo que le ayude para poder «impulsar y agilizar» los 47 casos que tiene en marcha. El magistrado, que ha realizado esta petición a través del presidente de la Audiencia Nacional, José Ramón Navarro, asegura que no se trata de un problema de cantidad, sino de la «complejidad» de las causas que investiga.

Velasco quiere que el nuevo juez se encargue de las nuevas causas durante un plazo inicial de seis meses, que sería prorrogable «según avancen las causas» por otros seis, según informaron fuentes jurídicas. La petición, avalada por el artículo 216 bis de la Ley de Enjuiciamiento Criminal y que recaerá en el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), necesitaría un informe de la Sala de Gobierno de la Audiencia Nacional.

En el escrito, Velasco recuerda el trabajo «impagable» de los funcionarios de su juzgado, el central de instrucción número 6 de la Audiencia Nacional, y explica que el refuerzo debe recaer en un juez, porque es el momento en el que el magistrado debe terminar de impulsar las causas con los autos de procesamiento o de transformación en procedimiento abreviado en asuntos «con miles de folios»; algo que solo puede hacer un magistrado.

Entre estas causas complejas, hay casos de corrupción, asuntos económicos, órdenes europeas de detención y entrega e investigaciones contra la banda terrorista ETA, dice el juez. Algunos de ellos son, además de la operación Púnica, la causa contra la banda motera Ángeles del Infierno, la del clan de los Polverino, asuntos de enaltecimiento del terrorismo o de blanqueo de capitales en complejas operaciones internacionales.

Además de esta petición, el juez Velasco ha troceado esta semana la causa en la que investiga la trama Púnica en doce piezas separadas para acelerar que lleguen a juicio aquellas a punto de cerrarse, como la que investiga el chivatazo de un Guardia Civil a los cabecilla de la red corrupta, el exsecretario general del PP madrileño, Francisco Granados, y su socio el empresario David Marjaliza, ambos en prisión preventiva desde octubre de 2014.

Esta causa investiga una extensísima tela de araña corrupta que se adjudicó más de 100 millones de euros en contrataciones irregulares en diversas comunidades autonómas y ayuntamientos. Por ella han dimitido ya varios alcaldes, tanto del PSOE como del PP, y han sido imputadas más de 100 personas.