Pilar Lima junto a sus intérpretes en su primera intervención en la Cámara Alta
Pilar Lima junto a sus intérpretes en su primera intervención en la Cámara Alta - podemos

La primera senadora sorda se estrena en la Cámara Alta de la mano de Podemos

Pilar Lima defiende el veto del partido a la Ley de Seguridad Nacional valiéndose de dos intérpretes

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La Cámara Alta se llena de nuevas caras tras las elecciones del 24 de mayo. Tras Maribel Mora y Ramón Espinar, era el turno de Pilar Lima, la tercera senadora de Podemos, que se ha estrenado este jueves defendiendo el veto de su partido a la Ley de Seguridad Nacional en la Comisión Constitucional.

Sentada frente a sus dos intérpretes, sonriente y valiéndose del lenguaje de signos, Lima ha hecho historia en la Cámara Alta al convertirse en la primera persona sorda en ocupar un asiento. «Siento un gran orgullo y asumo la responsabilidad de la confianza que la ciudadanía ha depositado en mí», ha comenzado Lima, antes de ejercer de portavoz del Grupo Mixto en defensa de los vetos presentados a la ley.

Lima ha pedido en su intervención un pacto de Estado contra el «terrorismo machista» y ha lamentado que la nueva norma no contempla la seguridad de las mujeres que están siendo asesinadas por esta causa.

Más allá de lo que supone su presencia en el Senado para la integración de la discapacidad en la esfera política, la intervención de Lima se recibió con atención especialmente por la novedad de que se hiciera con el lenguaje de signos.

«No me siento representante de la comunidad sorda», ha afirmado Lima a Ep. Sí siente que representa «a la gente que tiene ganas del cambio» y «dentro de ese colectivo hay personas con idiosincrasias muy diversas». Sí entiende que aporta «una novedad» al sistema político español, desde «la perspectiva de las personas con discapacidad» en el terreno legislativo. «Tenemos que incorporar esa perspectiva y la sensación que yo tengo es que la legislación, ahora mismo, ignora a todo este colectivo», explica. «Eso es un plus que yo tengo la obligación de añadir», prosigue Lima, hecho que también atribuye al resto de compañeros de partido pues sus objetivos en el Senado no son individuales, sino «fruto de un trabajo de equipo».

A finales del pasado mes de julio, la Presidencia de la Cámara Alta autorizó la contratación de dos personas para que ayudaran a Lima tanto en la Comunidad Valenciana como en Madrid. Esas personas tienen un «nexo directo» con la situación individual de la senadora, independientemente de su adscripción a un grupo parlamentario. Son intérpretes cualificados de la lengua de signos, con una titulación adecuada, y cesarán cuando lo haga la senadora. Además, se aprobó también en julio la «adaptación técnica necesaria» del hemiciclo, salas de reuniones y comisiones para que esos asistentes puedan ejercer su función.

El estreno en el Senado de Lima se produce antes de que haya tomado posesión de su cargo debido a que el primer Pleno se celebrará el 1 de septiembre, tras las vacaciones. La de Podemos lo hará como senadora de designación autonómica por la Comunidad Valenciana.

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