Detenidas once personas acusadas de los últimos asesinatos y tiroteos en Ceuta

Funcionarios de la Unidad de Delincuencia y Crimen Organizado (Udyco) de la Jefatura Superior de Ceuta y de la Sección Costa del Sol de la Comisaría General de Policía Judicial han completado con once arrestos la «Operación Hacha», relacionada —según sospechan— con « la perpetración de hechos delictivos de carácter grave con empleo de armas de fuego que han ocasionado la muerte o heridas de diversas personas en la ciudad autónoma con la consiguiente alarma social y de la población».

Según ha informado la Policía este miércoles en un comunicado, entre los detenidos está H.M.M., alias 'Chakor', supuesto líder de «una de las organizaciones criminales asentadas en Ceuta» considerada «la más violenta de la zona y la causante de los últimos hechos graves en la ciudad».

También han sido arrestados los hermanos H.M.A., alias 'Grana', y F.Z.M.A., 'Fati', que como 'Chakor' cuentan con múltiples antecedentes policiales, algunos por asesinato.

A 'Grana' le consideran el autor material de la muerte de M.A.A., 'El Caniche', el joven de 34 años que el pasado 15 de diciembre apareció con al menos un impacto de bala carbonizado en el interior de un coche blindado. La víctima era, según el relato policial, «uno de los integrantes de la banda liderada por 'Tafa Sodia', asesinado en julio de 2013, si bien posteriormente se habría unido a la de 'El Nene' —desaparecido desde agosto del año pasado— y finalmente de 'Chakor».

La Policía cree que para matarle el imputado habría sido asistido por S.M.M., la esposa del fallecido, y C.M.M., una cuñada, así como por su hermano, un menor de edad apodado 'Pajarito' y S.L.M., que habría colaborado «para el incendio del vehículo con el cadáver en su interior con la finalidad de destruir todas las huellas o vestigios que pudieran relacionarles con este hecho».

Este suceso formaría parte, a juicio de los investigadores, de la cadena de sucesos ligada a «la rivalidad manifiesta existente entre las distintas organizaciones criminales locales por disputas personales pero con el trasfondo del dominio territorial en el negocio del tráfico de estupefaciente, principalmente de hachís».

A los detenidos se les imputa también el tiroteo con el que el pasado 5 de enero intentaron acabar con la vida de las dos personas (R.M.L. y M.A.M.) que viajaban a bordo de un vehículo por las inmediaciones de la mezquita de Sidi Embarek y los disparos que en la misma zona, cerca de un punto de distribución de droga de sus «rivales», se produjeron el 7 de enero, incidente que se ligó extraoficialmente a una supuesta motivación yihadista.

En realidad se trataba de «la situación de envalentonamiento de los integrantes de la organización delictiva», que querían «acrecentar su posición de dominio sobre las otras organizaciones dedicadas al tráfico de estupefaciente».