Vuelta a la actividad sin materiales sanitarios para cumplir el protocolo de seguridad
«Nos hemos encontrado con muchas empresas que directamente no han podido abrir por no disponer de equipos de protección individual», denuncia Cepyme
La vuelta ayer a la actividad de los sectores no esenciales después de dos semanas parados por decreto se produjo lentamente, porque era festivo en varias comunidades autónomas, y sobre todo con mucho desconcierto e incertidumbre.
La situación ha sido «caótica» , afirmó el presidente de la federación de autónomos ATA, Lorenzo Amor, que ponía como ejemplo la aclaración realizada por el Gobierno en la noche del domingo sobre la construcción, actividad que no puede retomarse en los lugares habitados.
Amor, que también es vicepresidente de la CEOE, manifestó a este periódico que «la guía del Gobierno sobre medidas de prevención en el lugar de trabajo es bienvenida, pero no hay materiales sanitarios para cumplir los protocolos». Amor se refería a la falta de mascarillas y de trajes de protección (EPI) entre la inmensa mayoría de los autónomos y microempresas. Ni se las ha facilitado el Gobierno ni las han podido adquirir porque no las encuentran en el mercado.
Además, el reparto de mascarillas que realizó ayer el Ejecutivo solo se llevó a cabo en grandes ciudades. En Madrid, únicamente en los intercambiadores de transporte y en un 20% de las estaciones de Metro, según criticó el gobierno regional de Isabel Ayuso.
Por cierto, unas mascarillas que la Asociación Española de Normalización (UNE) desaconseja utilizarlas durante más de cuatro horas y en caso de que se humedezcan o deterioren hay que sustituirlas, tal y como publicó el propio Ministerio de Industria.
El presidente de Cepyme, Gerardo Cuerva, también dijo que «se ha vivido un primer día de reactivación de la actividad con mucha incertidumbre ». Añadió que «nos hemos encontrado con muchas empresas que directamente no han podido abrir por no disponer de equipos de protección individual para los trabajadores o han tenido que adecuar las situaciones de la empresa a esa falta de equipos».
Falta de abastecimiento
«Nos encontramos en una situación de falta de abastecimiento general y las que más lo sufren son las pequeñas empresas. Desde Cepyme, llevamos semanas solicitando al Gobierno que se garantice el abastecimiento y la respuesta que hemos obtenido durante estos días es que no va a haber ningún problema. Pero claramente nos encontramos con que las medidas no llegan a la última milla, no llega a la pequeña y mediana empresa», incide Cuerva .
El presidente de Ceim (Confederación Empresarial de Madrid), Miguel Garrido, consideró «insuficientes» los puntos de distribución establecidos de reparto y pidió canalizar la distribución del material a través de las propias asociaciones empresariales para que llegue a todas las empresas y a todos los trabajadores.
Asimismo, señaló que «es urgente establecer puntos de entrega de mascarillas y equipos de protección necesarios a la entrada de polígonos industriales y áreas empresariales , ya que son lugares a los que se llega a través de distintos medios de transporte y en la mayoría de los casos no se dispone de ningún tipo de medida de protección». Garrido explicó que ya que muchas empresas han escalonado la entrada de sus trabajadores para evitar aglomeraciones, «los empleados acceden al transporte público en horarios en los que ya no se distribuye ese material, poniendo en riesgo su salud y seguridad».
En este sentido, el presidente de ATA subraya que las pequeñas empresas no han tenido tiempo para adoptar las medidas que recoge esa guía, como mantener la distancia de seguridad y los paneles de metacrilato. E insiste en el «desconocimiento» que existe en el Gobierno sobre «la realidad del tejido empresarial español, en el que el 80% son autónomos y microempresas; si se suman las pymes, el porcentaje es del 95%».
Para el secretario general de la federación de Industria de CC.OO., Agustín Martín, la vuelta a la actividad se ha producido «con normalidad», aunque con «menor intensidad de la que esperábamos, debido sin duda a que hay muchas empresas afectadas por ERTE y otras que sufren la caída de la demanda o problemas de suministros». La única «incertidumbre», apunta a este periódico, está en las pymes de menos de seis trabajadores, en la que no hay representación sindical. «No sabemos si se están cumpliendo los protocolos», subraya.
Por su parte, también ha habido quejas en la Administración. El sindicato profesional de Justicia de USO denuncia que el Ministerio «no puede garantizar ni las distancias ni las medidas de higiene, desinfección y protección individual» y que «incumple su mandato de teletrabajo por la incapacidad de digitalizarse». La central critica que se obligue a tramitar todos los asuntos, sean o no de derechos fundamentales.
