Atletismo
Sebastian Coe: «Las zapatillas no consiguen los récords»
El presidente de la World Athletics asegura que estamos ante una nueva generación de grandes atletas y rechaza que estos sean unos Juegos marcados por la influencia de las zapatillas
Sir Sebastian Coe, presidente de la World Athletics (la Federación Internacional), está satisfecho con el desarrollo de los Juegos y del atletismo en particular. Después del retraso por la pandemia y la preocupación por los contagios, la llegada de las pruebas y las plusmarcas mundiales han generado un punto de ilusión que él considera «muy importante por el papel que tiene nuestro deporte en la sociedad». En una charla en un palco del Estadio Olímpico, Coe atiende a este periódico relajado, con un café en la mano y dispuesto a hablar de todos los temas de actualidad.
—¿Cuál es su balance de la competición hasta el momento?
—Estoy realmente satisfecho con el desarrollo de la competición. Está siendo fantástica, mejor de lo que podíamos esperar. Sabíamos de las dificultades que afrontábamos para realizar este campeonato, las dificultades de los atletas para preparar estos Juegos, pero el resultado está siendo fantástico.
—¿Se puede decir que estamos ante una nueva generación de atletas?
—Sí, absolutamente es una nueva generación de atletas. El talento de este grupo de atletas me hace ser muy optimista sobre el futuro. Tenemos talentos en los saltos, velocidad, pruebas de lanzamientos, allí donde mires ves que el rendimiento que están teniendo. Hay que ver por ejemplo que muchas de las grandes marcas han llegado por la mañana, me viene a la cabeza la final de longitud femenina, una gran competición para verla como espectador donde cualquier atleta estaba con posibilidades de competir en 6,80 o 6,90 metros.
—¿Qué puede decir de Mboma, subcampeona en 200 metros y una atleta que genera altas tasas de testosterona de forma natural?
—Nosotros hemos sido siempre muy claros en el camino a seguir en estos casos y las regulaciones que nosotros promovemos. Sabemos que el mayor impacto son en los 400, 800, 1.500 metros y la milla, y por eso hablamos de tratamiento o de subir de categoría. Mientras no se demuestre la influencia en 200, seguirá corriendo esa distancia.
—¿Cómo valora la influencia de las zapatillas en los nuevos registros?
—Estamos a favor de la innovación, porque siempre va con el desarrollo de nuestro deporte. Pero por otro lado, tenemos que estar muy atentos a que esa innovación no altere la propia naturaleza de nuestro deporte. Pero creo que en los próximos años este movimiento, este desarrollo va a continuar y el nivel de resultados en las competiciones seguirá creciendo. Todas las compañías están trabajando en la misma dirección y eso va a ser positivo para que haya un equilibrio y la tecnología esté al alcance de todos. Que haya equilibrio entre el desarrollo y una competición justa.
«Las compañías trabajan en la misma dirección y se trata de que haya equilibrio entre desarrollo y justicia»
—¿No le preocupa que se piense que sean unos Juegos donde las marcas se hacen gracias a las zapatillas?
—Las compañías trabajan para innovar materiales con los que se pueda correr más rápido, eso siempre ha sido así, lo más importante es que se trabaja de forma unida, que todos los atletas tengan acceso y que exista ese equilibrio del que hablábamos. Pero no creo que se pueda pensar en que los récords están hechos por el avance de la tecnología. Los deportistas han entendido que estos Juegos era el momento para estar en plenitud de forma, para demostrar lo que valen, que el campeonato es aquí y no unas semanas más tarde. Y no podemos obviar el trabajo y la preparación de los entrenadores, así que no se puede hablar solo de zapatillas. Quiero recordar que hace unos años las zapatillas eran mucho mejores que 40 años atrás cuando yo corría. Todo avanza.
—¿Qué importancia tienen las plusmarcas mundiales que se están consiguiendo para generar ilusión en una época tan dura en nuestra sociedad?
—Muy importante, realmente importante que los récords puedan generar ilusión. Es una gran cosa para nosotros, para que las televisiones puedan trasladar ese espectáculo a los espectadores que están en casa. Estamos en dos años complicadísimos donde el deporte tiene una gran responsabilidad en nuestro entorno, la gente lo ha pasado muy mal, sin poder ir a trabajar, los niños sin ir al colegio, por eso tenemos una gran importancia para nuestros aficionados, para crear esa ilusión.
«Mientras no se demuestre la influencia de la alta tasa de testosterona en el 200, seguirá corriendo»
—¿Cómo valora el traslado del Mundial de atletismo a 2022, con un Europeo el mismo verano?
—Será un año complicado porque los campeonatos que teníamos para este año los hemos tenido que trasladar a 2022 para dar espacio a los Juegos Olímpicos. Y en ese año teníamos que encontrar también nuestro espacio porque está programado el Europeo, pero también los Juegos de la Commonweath, 74 países en competición miembros de la World Athletic. Así que hemos tenido que tener en cuenta todas las sensibilidades para poder colocar el Campeonato del Mundo de Eugene. No es una fecha perfecta, seguro, pero cuando mueves el Mundial no es nada sencillo, porque también tienes que tener en cuenta los derechos televisivos.
—¿Cree que veremos público en ese Mundial?
—Espero que sí. Ojalá, pero no lo sé. Creo que en Estados Unidos habrá público, allí la gente está volviendo a los estadios. Así que espero que la situación esté mejor y podamos tener público.
—¿Cómo valora su labor en este año de pandemia?
—Como siempre he trabajado en favor de nuestro deporte, hemos hecho grandes cosas para comunicarnos. Ha sido un año muy complicado a nivel económico pero nuestras cuentas están bien, y el atletismo, que es lo más importante, está en buen momento.
