La genial respuesta de la Cultural de Durango a un ladrón
El modesto club, de Tercera división, ha enviado un mensaje por las redes al caco que robó en sus instalaciones
Actualizado: GuardarLa Cultural Deportiva Durango, equipo que milita en Tercera y es duodécimo en su grupo, ha alterado las redes sociales con su genial respuesta ante el robo que ha sufrido en sus instalaciones. Se trata de un club modesto y que trata de sobrevivir en el fútbol con un presupuesto reducido. Ante el robo, ha utilizado su perfil de Twitter para escribir un mensaje sensacional al caco, que se llevó dinero, ropa, material y dos televisores, entre otras cosas. Esta es la carta íntegra.
«Querido amigo visitante inesperado. Ha sido una pena no poder recibirte como te mereces en tu visita nocturna en las instalaciones de la Sociedad Cultural Deportiva Durango. Otro día avisa y charlamos un rato de tus problemas, inquietudes y demás.
Dicho esto, desearte que todo lo que nos has quitado sea para tu bien. Que las películas las veas bien en tu salón en la TV de 40" y en tu habitación en la TV de 32". Asimismo desear que con el dinero que te has llevado puedas dar de comer a los tuyos durante una temporada, que no te lo gastes en vicios. Con la ropa, que puedas abrigar a tus hijos o abrigarte tú. Con los balones, que disfruten tus hijos o hermanos, quién sabe igual algún día juegan en la Cultu. Sin más, desearte que mejore tu situación para que no tengas que volver a visitarnos.
Ah, y si algún día deseas ver algún partido, no dudes en dirigirte a nosotros para que te dejemos unas invitaciones en la entrada a tu nombre. Lo dicho, cuídate y sé feliz con lo que has logrado, que no ha sido otra cosa que perjudicar a un club modesto que entre sus objetivos está el formar personas, a parte de jugadores, para que no se vean abocados a tu tipo de vida y sean respetuosos con todos, pero sobre todo con ellos mismos. Hasta cuando quieras, recibe un abrazo».
El mensaje ha tenido ya múltiples respuestas de apoyo al modesto club de Durango. La intención es que el ladrón pueda recibir la carta o, al menos, captar la información que se transmite. No hay manera más elegante de denunciar el robo.
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