El futbolista que vive obsesionado con Bob Esponja

Se llama Michy Batshuayi, es un jugador belga de origen congolés y actualmente está a las órdenes del español Míchel en el Olympique de Marsella. Este joven delantero, que está a punto de cumplir 22 años (Bruselas, 2-10-1993) y ha visto cumplido su gran sueño de alcanzar la élite, tiene, sin embargo, otra gran pasión que no oculta. Como si de un niño se tratara, siente devoción por Bob Esponja y no se pierde ni un capítulo de su serie de dibujos animados favorita.

Pero la obsesión de Michy Batshuayi por Bob Esponja, Calamardo, Patricio y demás compañeros de aventuras va mucho más allá de la televisión. Así, en los desplazamientos de su equipo, no es nada extraño ver al futbolista acompañado por una llamativa mochila con la imagen del famoso personaje de dibujos animados.

Al futbolista le encanta toda la mercadotecnia relacionada con esta serie y, como no podía ser de otra manera, en la funda protectora de su teléfono móvil también aparece Bob Esponja. Su fijación por el simpático personaje llega hasta su ropa interior y juega los partidos del Marsella con unos calzoncillos en los que luce su inseparable, como han captado en más de una ocasión las cámaras de televisión y los objetivos de los fotógrafos.

Pero Batshuayi, al margen de su fijación por Bob Esponja, también hace gala de una personalidad muy peculiar que ha hecho que algunos ya le denominen con el sobrenombre del «Balotelli belga». Como el internacional italiano y a pesar de su juventud, el jugador del Marsella ya ha protagonizado algún escándalo. En 2013, fue expulsado de la concentración de la selección sub 21 junto a su compañero Cissé al ser descubiertos invitando prostitutas a la habitación de su hotel.