Cádiz CF

Optimismo

El Cádiz CF mostró un alto nivel de juego y un ritmo trepidante ante el mejor equipo de la categoría

Pepe Reyes
Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Ager Aketxe es una de las sensaciones del Cádiz CF.
Ager Aketxe es una de las sensaciones del Cádiz CF.

La cara más injusta y empecinada del fútbol rindió el pasado sábado su indeseada visita por el estadio Ramón de Carranza para colmar de infortunio el buen hacer desarrollado por el Cádiz CF. Equipo que firmó una gran segunda parte, en la que no sólo mostró un alto nivel de juego y un ritmo trepidante, sino al que se advirtió también una recuperada confianza en la ejecución de cuantas acciones emprendía.

Pero ya se sabe el carácter imprevisible, aleatorio e, incluso, ingrato, que a veces posee este deporte, en el que todo depende finalmente de si la pelota entra o no en la portería. Y a pesar de que se generaran varias y clamorosas ocasiones de gol frente al Levante, sólo una vez traspasó el balón la línea del marco contrario, por lo que el cuadro local, pese a merecer con creces un mejor resultado, no pudo pasar de la exigua suma del punto que concede el empate.

Lastimosa circunstancia que no constituyó óbice para que el aficionado abandonase las gradas con una indisimulada sensación de optimismo, por el excelente partido completado por los amarillos.

Dentro del buen tono mostrado por todo el conjunto, cabe destacar la excelente actuación de la pareja de centrocampistas, compuesta por un Garrido siempre presto al corte y a la anticipación y un José Mari atinado en los apoyos y preciso en los desplazamientos, que supo marcar el ritmo del juego. Pareja con la que Cervera parece haber encontrado el deseado equilibrio en la medular, al que también aporta bastante la creciente calidad que viene mostrando entre líneas ese prodigio técnico que es Aketxe. Jugador éste cuyo rendimiento va en aumento y que está llamado a erigirse en pieza decisiva en esta recta final de campeonato. Los saques de esquina y de falta que salen de sus botas significan riesgo inminente de gol para los rivales, por lo que éstos, advertidos del peligro, ya se guardarán de no cometer infracciones cercanas a su área. Circunstancia que, sin duda, será aprovechada por esos cuchillos escurridizos y veloces como son Salvi y Alvarito.

Ver los comentarios