Estoyanoff: "Me gustaría ayudar al Cádiz CF a conseguir el ascenso"

Fabián Larry Estoyanoff está como loco por vestir de amarillo y azul. También lo estaba por vestir de amarillo y negro, los colores del Peñarol de Montevideo, pero el histórico club uruguayo no ha querido repescar para la nueva temporada y todo hace indicar que volverá al club donde se formó, el Fénix. Eso será si antes el Cádiz CF no decide hacerle un guiño y comprarle el sueño de su regreso a la Tacita, ciudad en la que estuvo un año con ocasión de la vuelta del Cádiz CF a Primera División, temporada 2005/06 que jugó a las órdenes de su compatriota Víctor Espárrago gracias a la cesión del Valencia.

Las intenciones del 'lolo' Estoyanoff son claras. A su entorno más cercano se lo ha dejado dicho y ahora está a la espera de ponerse en contacto con su excompañero y amigo, Enrique Ortiz, para tratar de convencerle que se encuentra en plena forma a sus 33 años.

La posibilidad se antoja remota, pero por Estoyanoff no va a quedar. "Sé que el Cádiz CF está en una buena posición, lo sigo desde la distancia. Amo esa ciudad y amo a su gente", comenta a Canal Amarillo desde su país de origen y tremendamente ilusionado con la hipotética opción.

"Tengo mis mejores recuerdos y amigos en Cádiz. Me gustaría ir a ayudar al equipo a conseguir el ascenso", remata el extremo diestro, que después de estar un año jugando en Arabia dejará bien claro al Cádiz CF que en ningún momento sería un problema el aspecto económico ya que para él lo que prima ahora es su felicidad y sus ganas de volver a disfrutar con la que fue su afición.

Las ganas de Estoyanoff chocan con la remota posibilidad de que el Cádiz CF accediese a planteárselo incluso, ya que una vez cerrado el mercado de fichajes y el hecho de no tener ninguna ficha amateur libre en el primer equipo imposibilitarían dicha posibilidad. Solamente, en el caso de una lesión de larga duración (la más reciente fue la de Andrés Sánchez en los 'playoff'), el Cádiz CF podría poder acceder al mercado de fichajes otra vez. El sueño de Estoyanoff parece haber llegado muy tarde, pero quien sabe, cosas más raras se han visto en el fútbol.