Shakespeare en la playa

Julio Bravo

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28/01/2022
Actualizado a las 08:45h.

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Antes de sumergirse en la dirección de la Compañía Nacional de Teatro Clásico, Helena Pimenta mantenía un comentado idilio con William Shakespeare, que se reflejó en varios montajes (algunos muy recordados, como 'Sueño de una noche de verano') al frente de Ur Teatro, la compañía en la que la directora salmatina cimentó su prestigio. Para este regreso a la vida 'civil', Helena Pimenta ha elegido 'Noche de reyes', una celebrada comedia del dramaturgo británico. Envuelta en ese universo mágico, onírico y juguetón que se encuentra también en otras piezas shakespearianas -como la propia 'Sueño de una noche de verano'-, presenta una historia que juega con la farsa y el enredo, con el exotismo -está situada en la antigua Iliria, hoy Albania- y con ecos del teatro grecoromano.

Helena Pimenta firma, junto al siempre magnífico Álvaro Tato, la versión del texto. Una playa es el escenario dispuesto por la directora para una puesta en escena minimalista y apoyada en la comicidad bufonesca de varios de sus personajes. Destaca poderosamente el trabajo de Rafa Castejón, que desborda comicidad en su ridículo persohnaje de Malvolio.

Menos interesante resultan los momentos líricos, y es en buena parte por la elección de los intérpretes; las parejas que forman Haizea Baiges (Viola) y José Tomé (Orsino), por un lado, y , Carmen del Valle (Olivia) y Sacha Tomé (Sebastián) resultan, al margen de sus méritos, inverosímiles, por la diferencia de edad entre ellos, y lastran la comprensión de un espectáculo por otra parte muy entretenido y que muestra la enorme complicidad que existe entre Helena Pimenta y William Shakespeare.