Spotify pide perdón y retira los capítulos antivacunas más polémicos del 'podcast' de Joe Rogan

El boicot de los artistas no ha tenido más adhesiones significativas, pero las pérdidas en Bolsa y una encuesta que habla de bajas masivas en las suscripciones ha hecho recular a Daniel Ek, el director de la plataforma

El CEO de Spotify, Daniel Ek ABC

Nacho Serrano

El mercado del 'streaming' ha puesto de manifiesto el mayor cisma social que se haya visto en la historia reciente. Neil Young ha sido quien lo ha puesto sobre la mesa: se puede compartir espacio con artistas que lanzan mensajes de todas las ideologías, incluyendo las más radicales de ambos extremos, pero no con los de los antivacunas . El argumento de que en este caso «hay vidas en juego» parece razonable, pero sin duda está abierto a la crítica y ha generado un enorme debate sociocultural.

Young, ya lo saben, no está solo. A su boicot contra Spotify retirando su repertorio por las declaraciones 'negacionistas' que se han vertido en el programa de Joe Rogan, se han sumado sus viejos compinches Graham Nash, David Crosby y Stephen Stills , además de Joni Mitchell, India Arie, Lloyd Cole, Nils Logfren, Gilles Vigneault, la banda Failure y los podcasters Stewart Lee, Roxane Gay, René Browne y Mary Trump (sobrina de Donald). Y aunque en los últimos días la cosa se ha enfriado y no ha habido nuevas adhesiones significativas, este grupo de díscolos, que consideró «insuficiente» la primera reacción de Spotify anunciando nuevas medidas de control de contenidos, parece haber estar consiguiendo su objetivo porque ahora la compañía ha dado un salto cualitativo .

Daniel Ek, el CEO de la compañía sueca, ha enviado una carta a todos sus trabajadores pidiendo perdón por la polémica y revelando que se van a retirar los capítulos más controvertidos del 'podcast' de Joe Rogan (una decisión que al parecer ha sido tomada por el propio podcaster), lo cual podría entenderse como un éxito de la campaña de Young y compañía. «No hay palabras que pueda decir para transmitir adecuadamente lo mucho que lamento la forma en que la controversia de la Experiencia Joe Rogan sigue afectando a cada uno de vosotros. Algunos de los comentarios de Joe Rogan no solo son increíblemente hirientes, sino que quiero dejar bien claro que no representan los valores de esta empresa», dice a sus empleados.

Efectos colaterales

Spotify, sin embargo, no ha tomado esta decisión porque de pronto se haya sentido iluminada por las razones esgrimidas por los boicoteadores. Más bien ha debido ser por el efecto colateral generado en sus números: desde el inicio del conflicto, el valor de mercado de la compañía ha disminuido más de 2.000 millones de dólaresy sus acciones han caído más de un 12% . Y lo que es aún más alarmante: según una nueva encuesta de consumidores realizada por Forrester Research, el 19% de los usuarios de Spotify ha cancelado su suscripción o planea hacerlo en un futuro cercano en respuesta a la controversia. Incluso ha habido rumores de que los Obama también retirarían sus 'podcasts', ambos de audiencias millonarias.

Más allá del fondo (la lucha contra el negacionismo), esto plantea una cuestión interesante sobre la forma. ¿Es posible enfrentarse a un coloso de la tecnología? Lo que ha ocurrido en los últimos días parece demostrar que los músicos no pueden hacerlo solos, porque les ha faltado unión. Muchos artistas afirman estar de acuerdo con las razones del boicot pero no han dado el paso de apoyarlo activamente , bien por no tener control sobre sus derechos, bien por miedo a perder exposición y un dinerillo que no los hace ricos pero los ayuda a subsistir. Tal como dijo Rosanne Cash (hija de Johnny) la semana pasada, « no todos pueden permitirse el lujo de abandonar la plataforma». Y además, también está el miedo a entrar en una lista negra . Hay músicos que reciben tan poca remuneración de Spotify que han pensado apoyar el boicot por principios, pero que se han echado atrás ante la posibilidad de que una vez fuera, no puedan volver a entrar. Ha faltado una ola masiva de adhesiones que les hiciera confiar en que si se perdiera la batalla, habría toda una legión de compañeros dispuestos a decir «yo también soy Espartaco».

Líneas claras

Aunque el boicot parezca un éxito tras este último anuncio de Spotify comunicando la retirada de varios capítulos del 'podcast' de la discordia, en realidad hubiera sido un fracaso sin el apoyo de los usuarios porque ha despertado muchas dudas entre los artistas que se han planteado apoyarlo. Más allá del debate sobre los límites de la libertad de expresión , ¿es que acaso el resto de plataformas son puras de corazón? El negacionismo pone vidas en riesgo, sí, pero Neil Young ahora recomienda Amazon Music a los cuatro vientos, y la precariedad también mata. Aunque también puede que el viejo rockero piense que esa es una batalla perdida, y que es mejor centrarse en una que aún se pueda ganar.

Queda por saber si este giro en la política de Spotify será suficiente para los boicoteadores. Y Daniel Ek no las tiene todas consigo. «Aunque condeno enérgicamente lo que Joe ha dicho y estoy de acuerdo con la decisión de retirar algunos episodios de nuestra plataforma, soy consciente de que para algunos no será suficiente » afirma el CEO en su carta, que a pesar de todo deja meridianamente clara su postura: «No creo que silenciar a Joe sea la respuesta. Deberíamos tener líneas claras en torno a los contenidos y tomar medidas cuando se cruzan, pero cancelar voces es un terreno resbaladizo. Si miramos el tema de forma más amplia, es el pensamiento crítico y el debate abierto lo que impulsa un progreso real y necesario».

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