Cádiz cf
Juan Cala, el adiós a un presidente en el campo
El lebrijano cuelga las botas tras cuatro temporadas y 75 encuentros de amarillo, siendo un líder en el vestuario, el césped y dentro del club; autor del gol ante el Racing que «marcó todo el cadismo»
Vizcaíno llora a Cala
Era previsible que viendo su situación física y esa rodilla maltrecha que no terminaba de recuperarse, Juan Cala anunciara que colgaba las botas esta temporada. Sus incursiones en el mundo empresarial siendo codueño del Atlético Sanluqueño eran también un aviso de que el lebrijano pasaba a otro lado de este maravilloso e ingrato a veces mundo del fútbol.
El central ha colgado las botas tras una trayectoria futbolística que ya quisiera más de un pelotero de este deporte. El simple hecho de ser jugador de Primera División ya es un logro más que importante, unido a vestir camisetas como la del Sevilla, Getafe y Cádiz CF, los tres equipos que él mismo ha marcado como los más notorios, hacen que el camino de Cala en el mundo del fútbol haya sido de un nivel importante.
Recorrido con logros como el ascenso a Primera División de un equipo que llevaba más de una década sin pisar la máxima categoría. Aquella primera temporada de Cala, con 29 años, le comenzó a convertir en algo más que un futbolista. Vino de la mano de su amigo Manuel Vizcaíno, al que ya conocía del Sevilla. Éste le convenció del proyecto y le hizo un contrato que cumplía el año que viene. La respuesta del lebrijano fue en el terreno de juego, siendo indiscutible para Álvaro Cervera, aportando liderazgo, siendo portavoz del vestuario e incluso nexo de unión entre el entrenador entonces y el presidente por sus habituales discrepancias. Igual que Cala devolvió su confianza a Vizcaíno, también lo hizo con un Álvaro Cervera que veía al central como un jugador con mucho peso dentro del vestuario.
De aquella mágica temporada interrumpida por la pandemia, queda un comienzo espectacular y los 27 partidos que disputó el de Lebrija, todos titulares, marcando dos goles muy significativos. El primero ante el Racing en el tiempo de descuento, «el gol que marcó todo el cadismo», como él mismo lo definió. Cuando peor lo pasaba el Cádiz en ese tramo liguero Cala rescató al Cádiz con ese gol que suponía tres puntos muy importantes.
No menos notorio fue el gol ante el Numancia en plena pandemia. Un tanto de cabeza en la recta final del choque que dejó una de las imágenes más icónicas de los últimos años, el abrazo de Cala con Álvaro Cervera celebrando el gol en el banquillo. El lebrijano se fue directamente al banquillo para festejar el tanto con su entrenador, mostrando esa unión que ambos les caracterizó durante la etapa del técnico en Cádiz. Esa campaña Cala fue importante en el centro de la zaga del Cádiz CF, donde formó una dupla fundamental con Fali (en la mayoría de ocasiones) y con Marcos Mauro (otras veces).
La rodilla y el apoyo unánime en el 'caso Diakhaby'
Los problemas físicos más serios aparecieron para el lebrijano en la primera campaña en Primera (20-21). La rodilla comenzó a fastidiarle y tuvo que pasar por el quirófano para una artroscopia. Ello fue a final de esa campaña en la que el central primó ayudar al equipo, aún con molestias físicas, a recuperarse del todo. Con el equipo ya salvado, cuatro jornadas antes, el central tuvo que parar. Tres goles hizo el zaguero aquella primera campaña en la élite: Levante y Valencia en Carranza y Valladolid a domicilio.
Esa misma campaña fue la del incidente con el valencianista Dikhaby. Un lunar con el que intentaron machar la carrera del futbolista, pues si algo ha quedado claro con el paso del tiempo es que las denuncias de racismo se basaban en la nada. Empresas de lectura de labios contratadas por La Liga, cientos de imágenes del partido, declaraciones de los jugadores del partido. El futbolista francés del Valencia se cebó, por entonces y hasta hace bien poco, con Cala dejando caer algo que no pudo demostrar y que estaba basado únicamente en su propia versión.
Una situación en la que el jugador del Cádiz lo pasó mal pero en la que encontró una apoyo unánime de todo lo relacionado con el club cadista. Desde la entidad que lo supo gestionar bien, al cadismo y a los medios de comunicación que cubren diariamente al Cádiz CF. No hubo un solo periodista gaditano que no lo defendiera a en una situación tan injusta para el lebrijano.
Su tercera temporada como cadista ya fue más complicada por esa lesión de rodilla. Tardó en recuperarse del todo, e incluso él mismo pensó en la retirada por entonces. Volvió a jugar cuajando partidos notables como el disputado en San Mamés que acabaría con victoria amarilla gracias al gol de Salvi. Sin embargo, el relevo en el banquillo y la llegada de jugadores como Luis Hernández hizo que el protagonismod de Cala fuera a menos con Sergio. Apenas tres partidos en la segunda vuelta, con su participación, eso sí, en el choque de la permanencia en Vitoria.
El Bernabéu y su incursión sanluqueña
Y para acabar su última temporada como futbolista profesional en la que ya el central veía cerca la retirada. Su incursión en el mundo empresarial con su amigo Coke en el Sanluqueño, la rodilla que no respondía y un último partido donde él no sabía que iba a ser el último, pero que lo fue finalmente. El Bernabéu se convirtió a su pesar en el escenario de su adiós a finales de 2022. El siguiente mercado invernal, en la demostración de que el jugador era mucho más que eso, un referente en el club, dejaba su ficha para que la entidad la usara para nuevos fichajes.
Desde entonces y hasta hoy, la trayectoria de Cala tiene otra nota de renombre con el ascenso del Sanluqueño a Primera Federación. Su primera victoria en los despachos del jugador con madera de presidente que se empapó de la filosofía del Cádiz CF y que remó de amarillo hasta el último día.
