Merkel obtiene el respaldo del Parlamento alemán para armar a los Peshmerga

«Lo que está sucediendo es mas grave que lo que podría pasar». Con estas palabras la canciller federal, Angela Merkel, justificó ayer ante los diputados del Bundestag la decisión de su Gobierno de enviar material militar ofensivo a los Peshmerga kurdos para hacer frente a los yihadistas del Estado Islámico (EI) y romper el tabú alemán de suministrar armas a una parte en conflicto en plena guerra fuera de sus compromisos con la Alianza Atlántica. Y con esas palabras asumió también el riesgo de que las armas alemanas que próximamente serán entregadas a los milicianos kurdos puedan finalmente caer en manos equivocadas. Tras subrayar que ningún conflicto en el mundo se puede solucionar únicamente por la vía armada, la canciller afirmó que «hay situaciones en la que sólo los medios militares ayudan a contar de nuevo con opciones diplomáticas». Merkel recordó que los insurgentes del EI han cometido en las últimas semanas «atrocidades inconcebibles» y que «todo lo que no se ajusta a su visión del mundo es eliminado cruelmente. Abusan horriblemente de una religión para legitimar el asesinato, el terrorismo y la tiranía».

«Tenemos ahora la ocasión de salvar vidas humanas y de evitar nuevas masacres. Debemos aprovechar esa ocasión», señaló la jefa del Gobierno alemán ante el pleno parlamentario. Los yihadistas del EI controlan en Siria e Irak un territorio tan grande como la mitad de Alemania, dijo la canciller, quien advirtió de que si no se detiene su ofensiva existe el peligro evidente de que el Estado iraquí se descomponga y con ello se desestabilice aún más toda la región.

Las autoridades y los militares de la autonomía kurda del norte iraquí se encuentran al límite de sus posibilidades, no sólo para atender a los centenares de miles de refugiados, sino para hacer frente al EI. «Ellos son los que asumen los mayores riesgos para alcanzar algo que también es de nuestro interés», subrayó la canciller. En ese sentido destacó que en las filas del Estado Islámico combaten no menos de 400 hombres con pasaporte alemán y advirtió de que esos yidahistas tienen intención de traer en el futuro su guerra a Alemania y Europa.

En el posterior debate parlamentario La Izquierda y Los Verdes, en la oposición, criticaron la decisión de enviar armas a Kurdistán y exigieron a cambio un mayor envío de ayuda humanitaria. En la votación final, no vinculante, la ayuda militar a los Peshmerga recibió el respaldo mayoritario de los partidos de la coalición gubernamental conservadores y socialdemócratas.