Crecen las sospechas en la formación para el empleo

El trabajo de la Cámara de Cuentas no es el único borrón que planea sobre la formación profesional para el empleo que ahora ha pasado a manos de la Consejería de Educación. Mientras el departamento de Luciano Alonso asume definitivamente las competencias, que hasta el momento no ha retomados los programas formativos, Empleo continúa solicitando justificaciones de iniciativas ya finalizadas y muchas de ellas, abonadas a las entidades que han impartido cursos. Uno de los últimos que han tenido repercusión, también a raíz de un informe de la Cámara, es el de ayudas que el SAE concedió a UGT entre los años 2009 y 2010, curiosamente el mismo periodo en el que se detectaron las irregularidades en las subvenciones gestionadas por la Faffe. En este caso la sospecha cae sobre fondos por valor de 18,9 millones de euros que debían sufragar la formación de personas preferentemente ocupadas y que, como da a entender el informe del ente fiscalizador, se infló su coste para sacar beneficio.

En lo que toca a la provincia, la denuncia de una trabajadora que había recibido un curso de auxiliar de geriatría en Algeciras que impartía la empresa Natura fue el inicio de una investigación mucho más ambiciosa. Esta firma, con sede en Antequera, es una de las entidades que está dentro de la agrupación de empresas Prescal, dedicada a la formación de trabajadores y tras la que se encuentra el exconsejero de la Junta, el jerezano Ángel Ojeda Avilés, que también está vinculado a otras sociedades con la misma actividad. Natura obtuvo 2,5 millones en subvenciones de Empleo en las convocatorias de 2010 y 2011. En el último ejercicio, fue la entidad que recibió más dinero destinado a formación para el empleo de toda la provincia de Cádiz, solo superada por la Mancomunidad de Municipios de la Sierra de Cádiz.