El debate sobre el estado de la comunidad gira en el vacío tras el anuncio de Griñán

Los portavoces de PP-A e IULV-CA cambiaron sobre la marcha el guión de los discursos que tenían preparados para el debate sobre el estado de la comunidad para incluir una mención al anunció de Griñán de que no se presentará a la reelección, aunque mantuvieron, a seguido, sus argumentarios. La sesión se prolongó hasta pasadas las ocho de la tarde, pero apenas tuvo el pulso de las sesiones de control habituales de cada semana, dejando aparte la convulsión por la noticia del presidente y que la tribuna de invitados estaba al completo de autoridades, con la presencia incluso de la esposa de Griñán, María Teresa Caravaca.

Juan Ignacio Zoido, presidente del PP-A, rebatió la visión panorámica que dio el presidente de la Junta, que dijo que habla de la «Andalucía oficial», mientras que él lo hace de la «Andalucía real» y le canta «las verdades del barquero».

Pidió una «regeneración democrática» y medidas de verdadera austeridad, «porque aspiramos a algo más que a una cartilla de racionamiento», y recordó que un 31,7% de los andaluces vive por debajo del umbral de la pobreza.

Ofreció un pacto al presidente para librarlo del que considera que es el dictado de IU, que «ha dirigido los destinos de todo su Gobierno».

Hizo hincapié en la corrupción, para instar a «levantar todas las cartas y sacar a la luz los posibles fondos de reptiles aún ocultos» y fue el momento de mayor intensidad de la tarde, cuando el presidente de la Junta le reprochó haber dicho cosas «muy graves» sobre él, sin poder probar ni demostrar ni una de ellas, y se refirió a la existencia de una trama para implicarle en el caso, «sin fundamento y con calumnias».

«Portavoz de la troika»

José Antonio Castro, portavoz de IULV-CA, que cerró el turno de los grupos parlamentarios, mostró su habitual sintonía con el presidente de la Junta y atacó al portavoz del PP-A, a quien llegó a calificar como «portavoz de la troika y del Gobierno de Madrid».

Castro renovó el apoyo de su grupo al Gobierno de coalición, al que animó a seguir profundizando en las medidas acordadas, incluso ampliando la hoja de ruta.

Castro presumió también de la aportación de su formación a la acción de Gobierno , pidió «más decretos como el de la vivienda, que ha conseguido que mucha gente tomara conciencia de una injusticia y una estafa».

En su réplica Griñán se declaró «particularmente orgulloso» de la marcha del gobierno de coalición, «sin discusiones inútiles» que puedan «poner en peligro lo verdaderamente importante, salvaguardar el bienestar de los andaluces».