Protección a la juez Alaya

A la vista de como avanza la investigación sobre los ERE fraudulentos, donde ya está implicada media Junta -falta la otra media para convertirla en la 'cosa nostra'- y nadie se ha responsabilizado del expolio con el dinero de los parados, parece que se están poniendo nerviosos. Comenzando por la cabeza, que ya huele a chamusquina, y cuya única obsesión es poner trabas a la investigación, que ya ha puesto a los pies a quien fuese consejero de Empleo y administrador de los millones de ayudas. Aun así vemos sentados a los creadores de esta trama en los escaños del Parlamento y como si tal cosa, orgullosos de la 'faena' que originaron y que han seguido sus acólitos, hoy en día al frente de esta Institución fabricante del paro andaluz, que, tanto en un caso como en el otro, baten los records nacionales y se quedan tan anchos después de más de 30 años en el poder. Esperemos que se llegue hasta el final y caigan los peces gordos, pero mucho me temo que se hará lo posible y lo imposible por defenstrar a la magistrada que ya les resulta incómoda. Tanta imputación no les viene bien. Algo semejante sucedió en aquella 'operación Malaya' donde el juez Torres fue retirado del caso por estar llegando en su investigación a las puertas de la Junta. De esta manera pudieron salvar el trasero. Son todos o casi todos responsables de toda esta maraña corrupta donde los 'reptiles' no están en el fondo si no en la superficie.