Economia

Un drástico cambio para el negocio de la banca

Las entidades se pliegan al dictamen europeo, mientras esperan su aplicación «constructiva y también razonable»

MADRID. LA ASOCIACIÓN ESPAÑOLA DE BANCA (AEB) DEMANDA QUE EL DICTAMEN DE LA UNIÓN EUROPEA SE APLIQUE DE FORMA «CONSTRUCTIVA Y RAZONABLE». AÚN LO HA DEJADO MÁS CLARO EL SEGMENTO BANCARIO QUE SE DEDICA PROFESIONALMENTE AL NEGOCIO HIPOTECARIO. Actualizado: Guardar
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La Asociación Hipotecaria Española (AHE) insiste en que «el carácter abusivo de una cláusula ha de ser determinado en sede judicial». Por eso explica que la sentencia del Tribunal Europeo «no ha de servir como mecanismo generalizado de solucionar desahucios» ni para «dilatar la gestión de cobro». También la Confederación Española de Cajas de Ahorro (CECA) ha ofrecido su «leal colaboración» para diseñar reformas que permitan la aplicación «razonable» de la sentencia.

¿Qué han hecho los bancos frente al impago de las hipotecas? Las entidades aseguran que han negociado al máximo las condiciones de numerosos clientes afectados por la crisis, a los que han venido ofreciendo una readecuación de sus créditos a las nuevas circunstancias.

¿Se siguen realizando desahucios? Bancos y cajas afirman que, el pasado noviembre, paralizaron los procedimientos de expulsión de la vivienda habitual «para los colectivos vulnerables». Las entidades insisten en que, en paralelo, han ido dotando el Fondo Social de Viviendas en régimen de alquiler.

¿Qué puede cambiar a partir de ahora? Los bancos no pierden de vista que cambiar la normativa hipotecaria de cara al futuro sería gravemente perjudicial para su negocio. Hasta ahora, quien contrata una hipoteca en España responde con el bien adquirido, y también con el resto de su patrimonio. Es la contrapartida de que las entidades hayan venido financiando al tipo de interés del dinero a un año -el euríbor hipotecario, referencia de nueve de cada diez operaciones a tipo variable-, préstamos con vencimiento a veinte años o más Si en el futuro se limita la garantía al bien adquirido, sin duda se elevarán los tipos de interés de las operaciones, es el argumento de las entidades. Encarecer las hipotecas en un mercado prácticamente colapsado no hará sino reducir todavía más las posibilidades de esta área de negocio.

¿Quién paga la factura? Las entidades financieras intentan dar por cerrado el conflicto con la idea de que están prestando una asistencia a sus clientes más desfavorecidos, los expulsados de su vivienda habitual. Pero quedan flancos abiertos. Con carácter general, tendrían que responder por la sobrevaloración de las viviendas realizada por tasadoras muchas veces vinculadas a su grupo, y no tiene derecho a aplicar desproporcionados tipos de interés por los pagos aplazados... La sociedad tiene idea clara de que, en tiempos de la burbuja inmobiliaria, se equivocaron todos. Pero no entiende que la factura la paguen exclusivamente los clientes bancarios.

¿Cuándo se producirán los cambios? Las entidades están a la espera de los cambios normativos. A los hipotecados en dificultades les resta la esperanza de una negociación.