Mercadona renuncia a crecer en el exterior porque 2013 «será difícil»

Un paso atrás para coger impulso. En ese tono presentó el presidente de Mercadona, Juan Roig, la renuncia del gigante de la distribución a la expansión internacional que anunció hace ahora un año. Una decisión que tiene mucho que ver con un 2013 que, según sus palabras, será «muy, muy difícil» y que los hogares sufrirán en forma de caídas de rentas. Su compañía también acusará el bache y ha previsto para este ejercicio reducir sus beneficios (un 15%), algo que no ocurría desde 2009. En 2012, pese a las dificultades, Mercadona ganó 508 millones y creó 4.000 empleos.

Ahora su preocupación es capear la tormenta que se aproxima. Mercadona centrará este año su actividad en buscar fórmulas para bajar el precio del carro de la compra. «Porque nuestros jefes (clientes) van a tener menos renta y tenemos que preocuparnos de que puedan comprar a precios más baratos que ahora», resaltó Roig. La compañía también hará una fuerte apuesta por aumentar su oferta de productos frescos (fruta, pescado y carne) e intentará mejorar la eficiencia en toda su cadena agroalimentaria.

La empresa valenciana abdica así de su ambición de desembarcar en Italia, Portugal y Francia. Y retrocede justo cuando más negocios ven en la salida al exterior una vía de salvación ante la caída del consumo, que amenaza a miles de empresas. La rectificación parece no inquietar mucho a Roig. «Hay que hacer lo que uno cree que tiene que hacer y no lo que le dicen», justificó ayer en la presentación de resultados de 2012. El dueño de Mercadona dio a entender que ahora su mayor interés está en afianzar su liderazgo nacional, donde aspira a dominar toda la cadena de valor desde el campo o el mar hasta la mesa. Eso sí, Roig volverá a mirar al exterior cuando haya completado sus actuales objetivos y su negocio pueda ofrecer la misma cantidad de productos frescos que elaborados (hoy es aproximadamente la mitad). «Eso nos llevará de tres a cinco años», auguró.

Frente a su renuncia a la internacionalización, Roig destacó sus últimos proyectos de expansión en España. El pasado 4 de enero Mercadona abrió su primera tienda en Navarra (Ansoain) y en 2012 entró en Ibiza, Menorca y Fuerteventura. Y acaba de anunciar que a finales de 2014 o comienzos de 2015 empezará a abrir supermercados en Euskadi, donde planea gastar 50 millones de euros «inicialmente» en instalar 25 supermercados durante los próximos seis años.

Cuentas envidiables

Pese a los graves problemas de la economía española, Mercadona exhibe un año más unas cuentas envidiables. En 2012 ganó 508 millones de euros (un 7% más) tras pagar 244 millones en impuestos y repartir 263 millones entre su plantilla por haber cumplido los objetivos. Y en ese período creó 4.000 puestos de trabajo. «Por supuesto todos fijos», resaltó Roig, que está «muy orgulloso» de su capacidad para generar empleo en un contexto como el actual. Las ventas de Mercadona en 2012 ascendieron a 19.077 millones (un 7% más que en 2011, aunque por medio ha habido una subida del IVA y una fuerte caída del consumo).

En 2013 la compañía piensa generar otros 1.000 puestos de trabajo, y aumentar este año sus ventas un 5% (hasta 20.000 millones), pero prevé una caída de beneficios del 15% (hasta 430 millones). El motivo: «Vamos a hacer más con menos, vamos a bajar la cesta de la compra no tocando la calidad», zanjó Roig.

En respuesta a preguntas incómodas que giraban en torno a la supuesta aparición de su empresa en la relación de donantes al PP que habría elaborado el extesorero Luis Bárcenas, Roig fue tajante. «No es cierto, lo desmentimos», fue cuanto dijo.