Denuncian el pésimo estado del mobiliario de la calle Real

Son muchas las quejas vecinales que se acumulan por el mal estado en el que se encuentra el mobiliario urbano de la calle Real. A la falta de bancos para sentarse a lo largo de la vía, hay que sumar el deterioro que sufren por su uso y como consecuencia de los actos vandálicos. A ello hay que incluir el mal estado de las papeleras, ya que muchas de ellas presentan un estado avanzado de oxidación, cuando también faltan a lo largo de la vía o se encuentran arrancadas.

Unos síntomas que afean una arteria que pretende convertirse en santo y seña de la ciudad. No son solo algunos de los problemas que acumula esta calle como consecuencia de la mala ejecución por parte de la Junta de los trabajaos del tranvía. Una administración que continúa siendo responsable de lo que ocurra en la calle, hasta que el Ayuntamiento recepcione la actuación.

Algo que se espera que ocurra a lo largo del próximo año, si bien el Consistorio ya ha avisado que revisará con lupa la terminación de los elementos de la calle, antes de hacerse cargo del mantenimiento de una vía que es semipeatonal y que cuenta con más de dos kilómetros de largo.

Y es que son varios los problemas que preocupan. Entre ellos también se encuentra la falta de solidez de las losas. El continuo paso de vehículos en algunas intersecciones provoca que día tras día se tengan que realizar trabajos de reposición. Algo que pone en duda la resistencia del suelo al paso del vehículo y a sus vibraciones, ya que está confirmado que las losas no son capaces de soportar el paso de grandes vehículos, razón por la que se desaconseja que pase un autobús por el centro ante la ausencia del tranvía.

Muchos flecos que se deben hilar antes de que la actuación esté totalmente finalizada. En el caso del mobiliario las quejas se han centrado en la endeblez que muestran tantos bancos como papeleras, si bien en muchos casos su destrozo se debe a comportamientos incívicos.

Sea como fuere lo cierto es que repercute en la imagen de una calle que está consiguiendo uno de los objetivos para lo que fue proyectada, que el centro tenga cada vez mayor afluencia de personas. La falta de vehículos ha permitido que los peatones tomen la vía, si bien no está totalmente adaptada a sus necesidades.