Un muerto y 24 explosiones en viviendas de la isla de Córcega

Una veintena de homicidios y setenta atentados en lo que va de año constituyen el escalofriante retrato de la violencia que atenaza a la isla francesa de Córcega. Un drama que la víspera de las celebraciones de ayer por la 'Fiesta de la nación corsa' volvió a irrumpir con fuerza con el asesinato de un hombre en la localidad septentrional de Calvi y al menos 24 explosiones en residencias secundarias repartidas en distintos puntos de la región.

La cadena de ataques que estremeció la isla durante la noche del viernes tuvo lugar apenas unas horas después de que varios desconocidos mataran a tiros a un individuo identificado como Jéremy Mattioni mientras se encontraba en su coche en compañía de su hijo, que resultó herido leve. «Se trata de una verdadera ejecución, un acto bárbaro», lamentó ayer el ministro galo del Interior, Manuel Valls, que anunció que el Gobierno reforzará la seguridad en la zona y la cooperación entre las fuerzas del orden y la Justicia. «La violencia está anclada en Córcega desde hace demasiado tiempo», reconoció, al tiempo que se mostró confiado de que la nueva estrategia «va a dar resultados».

Un detenido

Aunque hasta el momento no ha habido reivindicación oficial de la oleada de atentados, las autoridades apuntan al Frente de Liberación Nacional Corso (FLNC), que el pasado mayo atacó otras 23 viviendas para denunciar la especulación inmobiliaria. Precisamente, medios de comunicación locales informaron de que en una de las casas donde se produjeron explosiones aparecieron pintadas las siglas de esa organización. Las residencias atacadas se encontraban vacías y la mayor parte estaba en construcción.

Justo antes de que tuvieran lugar las deflagraciones, un hombre resultó detenido en Calvi cuando transportaba explosivos en su vehículo. Al parecer, el arrestado es un miembro del FLNC, aunque las fuerzas de seguridad todavía no han facilitado detalles sobre la identidad del sospechoso.

El rebrote del terror en Córcega tiene lugar tres semanas después de que el Ejecutivo francés pidiera la colaboración de la población local en la lucha contra el terrorismo y la violencia en la isla. El llamamiento se realizó tras ser asesinado el día anterior el presidente de la Cámara de Comercio e Industria de Córcega del sur, Jacques Nacer.