Una huella imborrable por mucho que pase el tiempo

La muerte se llevó a Camarón a las 7.10 horas de un 2 de julio de hace 20 años. Comenzaba a superar una insuficiencia renal, cuando le sorprendió un fallo respiratorio. Esta vez no se pudo recuperar. Un final trágico que ya se barruntaba por el peregrinar de hospital en hospital que en los últimos meses realizaba el cantaor. A partir de ahí se divinizó, porque como dijo Paco de Lucía «la voz desgarrada de Camarón evocaba por sí sola la desolación de su pueblo», por lo que no hacía falta que recurriera a letras sociales.

La Isla, aquella que llevó en su nombre y que dio a conocer por medio mundo, se tiñó de luto y dejó pendiente un agradecimiento por ello. Han tenido que pasar 20 años para saldar parte de esa deuda, que aún sigue pendiente, con un pequeño homenaje que tuvo lugar ante cientos de isleños en su Venta de Vargas. Según los dichos populares «nadie es profeta en su tierra», ni aunque se sea un genio, un ídolo, una leyenda del flamenco, calificativos que se utilizan cada vez que se habla del cantaor. Porque si cientos había en la Plaza Juan Vargas, miles eran los que estaban en la plaza del Rey celebrando la victoria de España.

Queda mucho trabajo por hacer y de ello es consciente el Ayuntamiento. Motivo por el que pretende ponerse a trabajar ya de cara a la conmemoración del 25 aniversario, pues son muchos (entre ellos familiares y amigos) que consideran que en otros sitios se han volcado más con esta singular efemérides. Al menos, y a pesar de la situación económica que padecen las arcas municipales, se salvaron los muebles con una programación que llegó en la madrugada del lunes a su punto álgido. La cita contó con la presencia de varios familiares de José Monge, entre ellos su viuda Dolores Montoya 'La Chispa' y su hijo Luis, y las actuaciones de talentosos artistas como Jesús Castilla y Paquito de La Isla y de dos grandes del flamenco: Rancapino, al que acompañó al toque el propio Luis de Camarón, y Capullo de Jerez. El homenaje se dilató hasta bien entrada la madrugada y vivió su momento más emotivo a medianoche, cuando 'La Chispa', en compañía de los representantes municipales y tras asistir a la proyección de un breve vídeo de recuerdo a José Monge, realizó una ofrenda floral a la memoria de su marido depositando un ramo de flores a los pies del monumento a Camarón que preside la Plaza Juan Vargas.

«Sigue Vivo»

«Gracias por tenerle vivo», dijo la viuda del cantaor al dirigirse a los que asistieron al evento, para a continuación expresar la «pena» que le suscita esta fecha en la que perdió a su marido. Rancapino contó alguna que otra anécdota que vivió junto a Camarón y también expresó aquello de que «sigue vivo», porque su huella es imborrable. «La Isla no olvida a Camarón y fue muy emocionante ver el inmenso respeto y el silencio que arropó a la ofrenda floral que su viuda, 'la Chispa', realizó a los pies del monumento al cantaor», manifestó el primer teniente de alcalde, el andalucista, Francisco Romero.

Ayer culminó esta programación y lo hizo con un acto que también significa el inicio, porque la peña Camarón de La Isla toma el testigo para alargar esta fecha hasta diciembre. Una misa flamenca en la Iglesia Mayor puso el broche de oro a toda una semana que ha servido para la ciudad se dé cuenta de la importancia de la figura de Camarón, algo que sí parece haber ocultado el paso del tiempo.

Al menos el futuro se presenta más alentador. El alcalde, José Loaiza, está empeñado en convertir a Camarón en un referente de San Fernando y en motor económico con la vista puesta en el turismo. Ayer, curiosamente, el Ayuntamiento adquirió la casa natal del cantaor. Para el regidor «un paso muy importante en la recuperación de la huella que el genial cantaor dejó». Para hacerse con este inmueble de 240 metros cuadrados, permutado por un piso de titularidad municipal en la calle Marqués de Recaño, el Ayuntamiento ha abonado 45.195 euros.

Haciendo historia Loaiza recordó que fue el Partido Popular a través de su gestión al frente del Urbanismo municipal quien evitó en 2009 que la casa de Camarón se tirara y se construyese en su lugar un piso con tres viviendas. La intención municipal es recuperar el aspecto inicial de la vivienda en la que Camarón nació y vivió. «El inmueble va a ser una parte importante del legado de Camarón y para ello se están sentando las bases tal y como evidencia su adquisición para el patrimonio municipal», subrayó el alcalde.

A partir de ahí, «lo que sí tenemos claro es que su uso también estará ligado al turismo y la cultura. El visitante podrá disfrutar de la casa de Camarón».