Editorial

Inquietante diciembre

Los ajustes de hoy deberían convertirse en medidas de estímulo al finalizar 2012

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El paro registrado en diciembre se incrementó en tan solo un 0,04% respecto al mes anterior, pero esas 1.897 personas que se han sumado a las ya inscritas en los servicios públicos de empleo han sido suficientes para convertir el año 2011 en calamitoso. Si el resto de los indicadores económicos reflejasen una perspectiva más halagüeña a corto plazo cabría deducir que la reducción experimentada por la inscripción de desempleados y la menor bajada de las afiliaciones a la Seguridad Social suponen un cambio de tendencia. Pero ocurre todo lo contrario: ni la demanda exterior, ni el consumo interno ni la situación de la deuda permiten contemplar otro escenario que el recesivo con el consiguiente incremento del paro. Las medidas de ajuste adoptadas por el Gobierno Rajoy el pasado viernes comportarán, en lo inmediato, un retraimiento de la economía. Además el control del déficit público resulta imposible sin adelgazar las plantillas de las distintas administraciones. Se trata de un horizonte ineludible a corto plazo puesto que, independientemente de los compromisos adquiridos en el ámbito europeo para rebajar el desequilibrio presupuestario a un 4,4% en el presente ejercicio, la consolidación fiscal constituye un requisito inexcusable para devolver a España a la senda del crecimiento. Pero el acierto de tan disciplinada actuación, emprendida por el Gobierno de Zapatero a partir de mayo de 2010 y continuada con decisiones más drásticas por el Ejecutivo de Rajoy, deberá evaluarse en función de su capacidad para procurar una política de estímulos a lo largo de este año, que de entrada requerirá más sacrificios que el anterior. En caso contrario la economía y la sociedad española pueden verse abocados a una crisis verdaderamente destructora no solo del tejido productivo sino de las bases mismas de la solidaridad en las que se asienta nuestro estado del bienestar, tan dependiente del vínculo familiar. A este respecto diciembre ha aportado dos datos inquietantes. Frente a 4.422.359 parados inscritos hay solo 2.892.197 perceptores en una diferencia que irá ampliándose a medida que crezca el desempleo o se perpetúe en torno al 20%. Junto a ello, la confirmación de que 2011 se cerrará deficitario en cuanto a la Seguridad Social, dado que el monto total de las pensiones habrá sido superior al de las cotizaciones.