Contagio sin freno

La prima de riesgo española con respecto al bono alemán volvió ayer a alcanzar máximos históricos, a causa -ha dicho la Comisión- de lo que sucede en Italia y de los problemas generales que padece la UE. «La presión en los mercados que afecta a un número de Estados miembros, no sólo a España, es compleja y se debe a fenómenos que no están sólo ligados a los fundamentos de estas economías», reconoció el portavoz de Asuntos Económicos del gobierno europeo, Amadeu Altafaj. Si España tuvo que pagar ayer el tipo más alto desde 1997 por sus letras a 12 y 18 meses, por una cuantía de 3.160 millones, la desconfianza de los mercados se extendía y alcanzaba ya a otros países. La prima de riesgo de Francia llegaba a superar los 190 puntos, al igual que la de Austria, y la de Bélgica rebasaba los 300. El BCE volvió ayer a comprar deuda italiana, pese a la oposición alemana, pero la cúpula dirigente del Eurogrupo sigue sin tomar decisiones rotundas para parar los pies a los especuladores, bien flexibilizando el papel del BCE, bien ampliando de una vez el fondo de rescate y poniéndolo a trabajar en respaldo del euro y en garantía de la deuda de los diecisiete.