«No podemos dormirnos»

«Estoy muy satisfecho». Alejandro Campano debutó el sábado en Liga con el Xerez y acabó feliz, ya que «demostramos que es el camino a seguir para mejorar», a pesar «de que lo más importante hubiera sido lograr la victoria y los puntos». Después de una temporada lejos de la Segunda División, y ser el último jugador de campo en llegar al equipo, Campano comenta que se vio «bien», aunque reconoce que «se puede mejorar, poco a poco voy cogiendo la forma en la que me gustaría estar para llegar al final del partido bien, pero es normal y son los partidos los que te dan eso». Y es que la paliza física en el duelo ante el Nàstic fue tremenda, sobre todo para un jugador que tuvo que recorrerse la banda en continuas ocasiones: «La forma de jugar que se está dando es así, es bastante ofensivo y el míster está siendo valiente en muchos aspectos, y es algo importante. Pero es normal que tenga mucho recorrido, los jugadores de banda se meten muy bien para dentro y eso los laterales lo tienen que aprovechar». A pesar de todo, Campano matiza que «la falta de ritmo en esos momentos da igual, lo que pasa es que llega un momento en el que te metes quince subidas y el cuerpo lo nota, por eso, cuando lleve tres partidos más, esas subidas las pueda hacer de manera más continua o con más desahogo».

Una continuidad que el sevillano espera tener este fin de semana en Córdoba, a pesar de que el futbolista asegure que «a nadie le gusta jugar por le lesión de un compañero, eso nunca se lo deseo a nadie, y más cuando tenemos tanta competencia. Mi obligación es hacerlo bien en cada entrenamiento y dejarle claro al entrenador que quiero jugar y hacer un buen año. Tengo muchísimas ganas de hacerlo bien en el Xerez».

De Rumanía a Jerez

Y es que el lateral tenía ganas de volver a España después de una temporada en Rumanía. El jugador reconoce que ha notado «para bien» la diferencia entre España y Rumanía. «Allí me costó adaptarme a la forma de jugar y aquí, con los años que llevo jugando, me he adaptado rápidamente. Los compañeros me han ayudado mucho y estoy muy contento», afirma un Campano que tenía ganas de volver a la tierra, en parte una de las razones de su fichaje por el Xerez: «Valoraba principalmente lo deportivo, ya que pasé un mal año en Rumanía. Jugué 32 partidos, pero no es lo mismo que sentirte bien, disfrutar de la familia, de los entrenamientos, y eso me llena mucho y hace que me entrene bien y las cosas salgan mejor».

«Los jugadores se han adaptado bien a las exigencias económicas del Xerez», destaca Campano del equipo, el cual ve con aspiraciones de 'play off': «Hay que ser ambicioso, hay equipo para ello, pero mejor ir paso a paso porque esto es muy largo y no hay que descuidarse. Hay que seguir en la misma línea, que es muy buena, creo que podemos sacar más cosas positivas que negativas en este comienzo y hay que seguir apretando y no dormirse».