La incompatibilidad de los alcaldes sigue adelante

El Parlamento andaluz dio ayer tarde luz verde con la mayoría socialista y el respaldo de IU a la iniciativa planteada por el PSOE para que el cargo de diputado sea incompatible con el de alcalde y presidente de diputaciones provinciales. El PP, que votó en contra, volvió a lamentar en un tenso debate que se vaya a aprobar esta propuesta sin consenso de los tres grupos y a pocos meses de las elecciones. Los 17 alcaldes del PP en la Cámara, más la de Cádiz, Teófila Martínez, y Javier Arenas protagonizaron en la mañana una nueva protesta por la medida ante las puertas del salón de plenos.

El debate abordó numerosas propuestas para la transparencia política presentadas por los tres grupos, la mayoría para endurecer las incompatibilidades de tipo económico y salarial de los diputados y altos cargos de la Junta. Pero la incompatibilidad de los alcaldes eclipsó el debate, que dejó sin titular al acuerdo casi unánime (sólo un voto en contra) de la propuesta de reformar la ley de iniciativas populares y crear el 'escaño 110' para flexibilizar el acceso de los ciudadanos al Parlamento.

Críticas del PP

Sólo el bloque de propuestas presentado por el PSOE salió adelante. Su mayoría absoluta rechazó la tanda de iniciativas del PP, entre ellas la de que el mandato de los presidentes se limite a ocho años o la celebración de elecciones autonómicas separadas de la del resto.

El diputado socialista José Muñoz se mostró abierto al diálogo en el trámite de las reformas legales y justificó la de la Ley Electoral para dar exclusividad al cargo de diputado en que los ciudadanos quieren a los alcaldes «a tiempo completo y no a media jornada».

El portavoz del PP, Antonio Sanz, dijo que el único objetivo de la medida es «echar a los alcaldes del Parlamento andaluz para que no se escuche su voz». Sanz recordó que los alcaldes-diputados del PP han presentado 6.161 iniciativas en la Cámara, frente a las 3.448 de todos los diputados socialistas. El portavoz de IU, Diego Valderas, dijo que las medidas que propone el PSOE para la transparencia «se quedan cortas», aunque las apoyó. IU reclamó sin éxito una reforma de la ley electoral que iguale el voto para que un diputado de su formación cueste el mismo número de votos que el de los partidos mayoritarios.