Boceto del puente, adjudicado a SV60 y anulado por la Justicia. :: L.V.
EL PUERTO

La adjudicación del diseño del puente queda anulada

Una sentencia invalida el concurso público que ganó SV60 Arquitectos para hacer el proyecto y ordena al Ayuntamiento repetir el proceso

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El proyecto del gran puente que unirá las dos márgenes del río Guadalete ha sufrido un importante revés que supondrá un retraso en su construcción. Una sentencia del Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 2 de Cádiz, ha anulado la adjudicación al estudio de arquitectura SV60 que efectuó la empresa municipal Impulsa en octubre de 2009 por importe de 208.000 euros.

Esta empresa ganó en concurso público los trabajos de redacción de los proyectos básico y de ejecución y dirección de obra de esta infraestructura que es una de las banderas del gobierno popular de Enrique Moresco. El juez ha ordenado repetir el procedimiento de adjudicación, al haberse aplicado para su resolución un criterio contrario al pliego de condiciones bajo el que concurrieron otros estudios de arquitectos, como el de Fernando Visedo y los ingenieros Indalecio de la Lastra y Juan Cañadas, quienes recurrieron el concurso público que se abrió en diciembre de 2008.

Su abogado, Francisco Lara, informó sobre el dictamen judicial, que redunda en la concesión arbitraria del contrato a un aspirante que no era el más ventajoso con respecto a los tiempos fijados para la elaboración del encargo: dos meses para el proyecto básico y cuatro para el de ejecución.

Según la sentencia, «no deja de ser llamativo que el Comité Técnico de Expertos propusiera dos adjudicatarios cuando la mejor oferta era la del grupo de Visedo, y no sólo a éste como debía, y que la mesa de contratación se inclinara SV 60 Arquitectos; y que luego modifique el criterio de valoración auspiciando a los segundos». La resolución judicial expone que a esta circunstancia hay que sumar que a SV60 se le reconocieron veinte puntos en contra de lo previsto por el decreto que anuló la primera adjudicación. «Hay ciertamente motivos para dudar de la corrección del proceso».

El escrito redunda en que en la asignación de baremo a los participantes en el concurso Impulsa El Puerto debió respetar «absolutamente» las reglas que la propia empresa municipal estableció en el correspondiente pliego. «Sin sustituirlas por otras, como aquí se ha hecho, ni adoptar criterios contradictorios». El Ayuntamiento, de momento, no se ha pronunciado al respecto de este varapalo.