Gana la apuesta por la paz

San Sebastián se proclamó ayer vencedora en la carrera por conseguir la capitalidad cultural para el año 2016. Seis ciudades competían para lograr tal título, que la ciudad vasca compartirá con la polaca de Wroclaw. Burgos, Segovia, Las Palmas, Zaragoza y Córdoba aspiraban al mismo honor, en una lid en la que partía como favorita la capital andaluza. Los dirigentes andaluces no ocultaron su decepción e incluso la ministra de Medio Ambiente, Rural y Marino, Rosa Aguilar, no ocultó su enojo. La ministra cordobesa llegó a tildar la decisión de «magnífico error». Consideró totalmente desacertado el que se haya premiado el proceso de paz del País Vasco con la apuesta donostiarra. «El camino a la paz se refuerza de otra manera», dijo con disgusto la ministra.

El presidente del jurado que tomó la decisión de elegir entra las seis opciones, el austriaco Manfred Gaulhofer, subrayó que la disputa estuvo muy reñida. «Todas eran grandes candidaturas, pero San Sebastián tenía algo más. Seguramente uno de sus bazas fuera el gran compromiso en contra de la violencia y la idea de usar la cultura para ello», destacó. La elección de San Sebastián hizo que sus representantes políticos estallaran de alegría. Hubo abrazos, gritos cánticos y ondear de banderas.

El exalcalde de San Sebastián Odón Elorza, y el hombre que ha recogido el testigo para regir la corporación municipal, Juan Karlos Izagirre, expresaron sin pudor su euforia. Elorza no pudo reprimir las lágrimas, mientras que Izagirre resalto que la victoria de San Sebastián sobre sus adversarias radica en buena medida en que la candidatura donostiarra ha logrado aunar ideologías dispares. Con todo, a nadie se le escapa que la situación política, con San Sebastián gobernada por Bildu, concita incertidumbres. Para el nuevo alcalde, la capitalidad cultural es un respaldo inequívoco a la pacificación de Euskadi, «un proceso que no tiene marcha atrás». Izagirre apeló a la suma de voluntades e hizo un alegato en favor de la cultura y lengua vascas. «Todos los que se han sumado a Donosti 2016 van a tener cabida», remachó el primer edil. El lehendakari Patxi López se felicitó por la decisión del jurado, que halaga a un país con fama de «hospitalario» y que está en vías de «superar sus fracturas». «Han sido muchos meses de trabajo hasta elaborar un proyecto excelente, atrayente e imaginativo», adujo López.

La ministra de Cultura, Ángeles González-Sinde, quiso poner el acento en la «neutralidad y transparencia» que ha garantizado en todo momento el departamento que dirige. No obstante, González-Sinde abandonó su equidistancia para encomiar el tesón del socialista Odón Elorza, quien «ha tenido la nobleza de seguir adelante defendiendo su proyecto incluso después de haber perdido la alcaldía».

«Muy dolida»

La ministra Aguilar no aceptó con mucha deportividad el fallo. Asumió que estaba «muy dolida» por la «injusticia» que se había cometida con Córdoba, que ha quedado relegada por la prevalencia de criterios políticos. El mismo argumento, la politización de la decisión, esgrimió el presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera. En idéntica línea, el alcalde de Zaragoza, Juan Alberto Belloch, consideró un «disparate» la designación de San Sebastián. Belloch pronosticó que Bildú convertirá las actividades culturales en propaganda.

Pese al contratiempo sufrido, Junta de Andalucía mantendrá sus compromisos» con Córdoba, según adelantó el presidente José Antonio Griñán, quien no ocultó su «decepción» por lo ocurrido.

Manfred Gaulhofer se congratuló de la calidad exhibida por todas las candidaturas españolas. «En ningún otro país se habían presentado tantas ciudades y proyectos de tal nivel», explicó Gaulhofer.