El teatrillo terminó a las puertas de la sucursal ante la atónita mirada de los viandantes. :: JAVIER FERGO
Jerez

Los 'indignados' trasladan sus protestas a una oficina bancaria

Al igual que han hecho en otras ciudades, realizaron una acción reivindicativa ante la sorpresa de empleados y clientes de la entidad

JEREZ. Actualizado: Guardar
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Ataviados con traje de chaqueta, corbata y narices de cerdo. Así iban vestidos varios miembros del movimiento 15-M en la protesta que llevaron a cabo ayer en la céntrica oficina bancaria del BBVA en la Rotonda de los Casinos. Otras ciudades, como Cádiz, Madrid, Barcelona o Sevilla ya han presenciado acciones similares.

Pocos minutos después de las once de la mañana, algunos jóvenes entraron en la sucursal y se echaron al suelo mientras que otro les arrojaba copias de billetes que mordían ansiosamente. Los papeles salían de un maletín en el que se podía leer 'Gobierno'. Su intervención apenas duró unos minutos pero fue lo suficiente para que los responsables de la oficina llamaran a las fuerzas de seguridad. Mientras tanto, clientes y empleados de la entidad contemplaban entre asombrados y divertidos la iniciativa de los acampados.

Mientras transcurría la acción en el interior de la oficina, una veintena de personas se concentraron en la puerta con pancartas y megáfonos para reclamar «transparencia bancaria ya», como reza uno de los panfletos repartidos a los viandantes. «Si la gente supiera lo que hacen los bancos con su dinero, al día siguiente habría una revolución», continuaba el texto con la cita de Henry Ford. Con la ayuda del megáfono hicieron saber a los allí presentes algunas de las inversiones de grandes entidades bancarias en la construcción de presas o plantas hidroeléctricas, el mantenimiento de una mina de oro a cielo abierto en Perú o de cobre en Chile y el gaseoducto en Bolivia, entre otras. La recomendación del movimiento 15-M a los bancos y cajas de ahorro es «que no inviertan, ni directa ni indirectamente, ni presten ningún tipo de asistencia financiera a empresas que desarrollen, mantengan o produzcan municiones o armas controvertidas».

Tras la acción , varios miembros de la protestas volvieron a entrar en la oficina bancaria a recoger todos los papeles que habían arrojado al suelo mientras algunos clientes aplaudían el gesto.

Sin incidentes

Agentes de la Policía Local y Nacional acudieron al aviso del banco y, sin que se produjera ningún tipo de incidente, la concentración se disolvió con rapidez. Pocos minutos más tarde, la normalidad regresó a la Rotonda de los Casinos y los acampados, a la plaza del Arenal.

La acción de ayer fue la segunda iniciativa que los miembros del movimiento 15-M han llevado a cabo fuera de su céntrico cuartel general. La primera tuvo lugar este mismo lunes en la oficina del Servicio Andaluz de Empleo (SAE) en Madre de Dios. Allí, un grupo de jóvenes realizó un sorteo en el que los premios eran contratos basura, de prácticas o directamente un carnet de paro.

Al margen de estas acciones puntuales, el colectivo sigue acampado en la plaza del Arenal y celebra asambleas cada tarde a las 20.00 horas. La organización de los manifestantes sigue perfeccionándose con el paso de los días y las diferentes comisiones se encargan de que todo funcione correctamente: «Hoy tenemos 34 tiendas de campaña. Cada vez somos más y mejora la comunicación y la organización», explicó el portavoz de los 'indignados' en Jerez, Joaquín Mateos.

El colectivo ya anunció hace unos días su intención de seguir adelante de forma indefinida después de siete días durmiendo al raso, incluido el día de reflexión y la jornada electoral. Continúan, igualmente, recogiendo las propuestas de los ciudadanos a través de los grupos de debate que organizan cada noche sobre diferentes temas como educación, ciudadanía y medio ambiente, entre otros, que pasarán a formar parte de un documento final.

«Hay más gente de la que esperábamos después de tantos días», continuó Mateos, que no se olvida de agradecer cada vez que puede la generosidad de los bares y establecimientos de la zona que les proporcionan alimentos y otros artículos. Además de debates y asambleas, organizan proyecciones de documentales, talleres de danza o relajación y otras actividades que van surgiendo. «Aquí puede participar todo el mundo porque esto es el ágora de Jerez», dijo el portavoz.