Los trabajadores de la residencia ya se encerraron en el Obispado en agosto de 2010. :: LA VOZ
CÁDIZ

El Obispado pedirá más plazas concertadas en San Juan de Dios

El vicario de la diócesis intentará que la Junta subvencione hasta 50 vacantes y transmite calma a los trabajadores amenzados de despido

CÁDIZ. Actualizado: Guardar
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El jueves pasado se agravó la compleja situación que está viviendo la plantilla del viejo Hospital San Juan de Dios cuando el gerente de Fundación Gerón, Javier Merino, aseguró que sólo contrataría a siete empleados de la antigua nómina. Estas declaraciones las hizo Merino tras saber que la delegación provincial de Bienestar Social de la Junta solo subvencionará 25 plazas de la nueva residencia de ancianos. En ese momento, el representante sindical de los trabajadores, secretario general de Sanidad de CC OO, José Antonio Aparicio, anunció movilizaciones y un posible encierro en el Obispado. Fue entonces cuando el vicario de la diócesis, Guillermo Domínguez-Leonsegui, se ofreció a mediar en el conflicto.

Pero la mediación de Domínguez-Leonsegui llega tarde para los trabajadores porque el gerente de Gerón afirma ahora que necesita el concierto de todas las 106 plazas sin comprometer (14 son para el Obispado) para sacar adelante la empresa. «Pero esto lo dice mientras que está formando a gente nueva para la residencia de Santo Domingo», apuntó Aparicio, quien teme que además del «chantaje que hace Gerón a la Junta, el objetivo sea deshacerse de los trabajadores con más antigüedad».

El vicario les aseguró ayer que mediará entre la Junta y la empresa. A la primera le pedirá que aumente el número de plazas concertadas, de las 25 conocidas al menos a 50, lo que garantizaría que se mantuviera a buena parte de la plantilla en la residencia. A la segunda, que se ajuste para asumir a la plantilla. Y a los trabajadores les ha pedido calma, pero los empleados, que asumieron ya un mes sin sueldo, decidieron en asamblea ayer que hoy se manifestarían con una marcha desde la sede laboral hasta la plaza Asdrúbal.

«En el Obispado desconocían la situación en la que estaban los trabajadores. La plantilla ha soportado un ERE de cuatro años, con lo que ha agotado todas su prestaciones para facilitar las cosas a la empresa», sentenció Aparicio. «Y ellos no tienen la culpa de que encontraran yacimientos arqueológicos en el solar o de que se retrase la apertura», apuntó el representante de CC OO, quien recordó que la Fundación factura 80 millones de euros al año a la Junta por el concierto de otras residencias en la comunidad.

En un punto en el que coinciden todas las partes es en que Cádiz necesita una residencia de ancianos como la que está a punto para abrir en San Juan de Dios.