AQUELLAS FOTOS ANTIGUAS

Hace tiempo que recibí en el buzón del email una presentación con fotografías de Cádiz de hace 30 años y una de las cosas comunes que tienen todas ellas es su limpieza. Limpieza en la imagen y en el paisaje. Parece como si todas las calles fuesen nuevas, y aunque ya existía el retoque fotográfico en esa época, no era tan usado como sí lo es ahora. La forma de captar estas imágenes tan pulcras e inocentes se basaba en la reflexión del espacio, la luz del sol, la hora del día y el tiempo de exposición. Las cámaras de entonces tampoco eran tan nítidas y por ello también ayudaba a que las calles se vieran más limpias, pues el detalle de la suciedad se escondía entre el contexto general de la captura. Pero aún así, aunque la fotografía no capte la realidad si queremos hacer una lectura fácil de ella, como representación fiel de la realidad contenida en una imagen limitada por un marco concreto, que muchas de estas fotos parecen casi maquetas, brillando las personas por su ausencia. ¿Y por qué? ¿No convenía? ¿Estropeaban la composición? No, nada de eso. Eran cuestiones técnicas. Recordemos la primera toma fotografica recogida por Daguerre en París en 1838. Entre otras, las fotos de la presentación, enseñaban el estado por aquel entonces del Paseo de Canalejas con tranvía o la Plaza San Juan de Dios . El antiguo Hotel Playa, las casetas que cada familia tenían en la arena...y decenas de fotos más en las que reconocemos nuestra ciudad y que de verdad vemos que fue en esa época, o en una anterior, cuando se ganó el apelativo de 'Tacita de plata'.