Quirós acusa al alcalde de enquistar la huelga de autobuses urbanos

El conflicto de los autobuses, cuyos paros parciales se han interrumpido durante la Semana Santa, ya ha tomado tintes políticos por la práctica ausencia de negociación entre el Ayuntamiento y los trabajadores. Los grupos de la oposición defienden las demandas del comité de empresa, que reclama la inclusión en el pliego de condiciones de adjudicación del servicio, que será en un par de meses, de varias mejoras laborales que habían logrado a lo largo de los años.

La edil de Medio Ambiente, Blanca Merino, argumentó en su última comparecencia que todas esas mejoras ya están incluidas y que los empleados quieren incluir otras ventajas contraviniendo un acuerdo del Sercla en el que se comprometieron a no reivindicar nada más a cambio de un incremento salarial de 120 euros mensuales. Así las cosas, el portavoz y candidato a la alcaldía socialista, Ignacio García de Quirós, acusó al alcalde, Enrique Moresco, de «falta de ética y moral» y de dejar que la edil, que no va en las nuevas listas electorales, asuma su muerte política con esta crisis. «Está dejando que el conflicto se enquiste y que los usuarios sigan pagando las consecuencias. Es incomprensible que no sea capaz de sentar a las partes y dialogar».

Quirós aseguró que el alcalde consintió que la empresa GDF, cuyo contrato acaba el dos de junio, realizara recortes en el servicio sin la aprobación del pleno municipal. «Y ahora ha olvidado todos sus compromisos. Y que hace un año les prometió que contaría con ellos para elaborar el mejor pliego de condiciones. Pero está aplicando la política de la descalificación, torpedeando a los trabajadores mientras la empresa se va de rositas. Y así no se busca el consenso ni se consigue un acuerdo para que los usuarios estén tranquilos».

Contra el ERE de Alestis

El candidato socialista visitó la planta de Alestis junto a la parlamentaria María Cózar. Ambos trasladaron su apoyo a la plantilla ante el expediente de regulación de empleo presentado por la empresa, a la que instaron a dialogar con los sindicatos para evitar los despidos. Por otro lado, Cózar advirtió una «sensación de decadencia» en referencia al estado ruinoso en que se encuentran muchos edificios del casco histórico. En este sentido, la parlamentaria entendió que si la Junta ha denegado la declaración de zona de intervención especial para el centro, con la consecuente inyección económica para rehabilitar edificios, se debe a que el Consistorio no ha realizado bien los trámites.