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INSULTOS

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Uno de los defectos más ostensibles de la España actual, y en esto la televisión tiene un papel protagonista, es el absoluto abandono de las buenas formas. O sea: no es bueno llamar 'gilipollas' a un espectador que te critica, como tampoco es de recibo que le espetes 'tu puta madre' a una espectadora que hace lo propio. Esto último lo profirió Jordi González, autor intelectual de 'La Noria', cuando una corresponsal cibernética le reprochó que su programa era telebasura. El lío, por cierto, venía a cuento de que González, desde esa indiscutible altura moral que le caracteriza, había descalificado como 'gentuza' a otro grupo de comunicación. Luego González ha pedido disculpas por lo de la madre de la corresponsal, pero no por lo otro. En cuanto al 'gilipollas', eso es factoría Buenafuente. Ocurre que Buenafuente ha capitaneado una campaña contra el maltrato animal (en realidad quieren decir 'tratar mal a los animales') y, a raíz de eso, un cibernauta escribió en el twitter del programa: 'Libia en plena guerra y la preocupación de Buenafuente y otros es el maltrato animal. Vaya tela'. La respuesta de Buenafuente distó de ser versallesca: 'Tú eres un gilipollas'. Y, hombre, es verdad que no se ve qué tiene que ver Libia con el maltrato ni el culo con las témporas, pero ni siquiera eso justifica que el maestre comunicador del buque insulte a un tipo que grita desde el muelle. Aquí hay dos cuestiones, creo yo. Una, puramente formal, pero no menor, es la conveniencia de mantener unos mínimos modales, porque, si no, la vida es inaguantable. La otra es que, quieran o no González y Buenafuente, ellos están en una posición de poder frente a sus espectadores, y no es tolerable que el poderoso abuse del menesteroso. Siempre ha habido gente dispuesta a escupir hacia lo alto, pero nunca se ha considerado bueno devolver el salivazo; entre otras cosas, porque la inercia ya se encarga de devolver el proyectil a su punto de origen. Aunque tal vez nuestros caciques televisivos de hoy no estén preparados para entender estas leyes elementales de la física.