La Policía destinará buena parte de sus refuerzos a Seguridad Ciudadana

La Comisaría de Jerez lleva esperando un tiempo casi indefinido a que lleguen refuerzos, y ayer por fin se puso una fecha aproximada al desembarco del medio centenar de agentes cuyas plazas se convocaron el pasado año. Será el 14 de febrero cuando se publique el listado definitivo y a partir de ahí, los funcionarios contarán con un plazo nunca superior a un mes para presentarse en su lugar de destino.

La maltrecha plantilla jerezana se frota las manos ante la llegada de estos compañeros, que aunque siguen sin ser suficientes sí paliarán en gran medida muchas de las carencias con las que se cuenta. Fuentes de la Confederación Española de Policía confirmaron esta noticia, aclarando que a pesar de que son 53 las plazas convocadas finalmente se incorporarán 45 agentes nuevos, quitando a ocho que permanecen en comisión de servicio y que se han visto obligados a solicitar su plaza.

A mediados de marzo, por tanto, el personal se incrementará notablemente y, lo que resulta más positivo aún, se reforzarán áreas tan necesitadas como la de Seguridad Ciudadana. Según estas fuentes, ésa es la intención del comisario que quiere incorporar a este servicio una veintena de agentes, con el fin de aumentar la presencia en las calles y responder así a una de las demandas más recurrentes de los jerezanos.

Sin embargo, toda cara tiene su cruz y desde la CEP apuntan a que la subida en el número de funcionarios no irá pareja con el aumento de coches y, por tanto, las labores de patrullaje se convertirán en una odisea. «Hay que recordar que solo tenemos tres coches y a pie no se patrulla. Así que tendrán que ir en furgonetas cuando se pueda, porque las motocicletas están todas averiadas».

Los turnos no cuadran

Como explicaron, teniendo en cuenta que un turno está formado por diez personas, y a cada uno le corresponde un vehículo, harían falta otros dos más para que se realizaran las labores de vigilancia con todas las garantías. Por ello, y aunque en sus declaraciones no se muestran nada confiados en lo que pueda pasar, desde el sindicato pedirán de forma oficial una dotación de vehículos coincidiendo con el aumento de la plantilla.

Esta oportunidad, por otro lado, podría ser aprovechada para responder a la reivindicación de las asociaciones vecinales de que vuelva la figura del policía de barrio. Hace solo unos días, el presidente de la federación vecinal Solidaridad, Sebastián Peña, señalaba como una de las prioridades de los ciudadanos el rescate de este tipo de agentes para garantizar una mayor seguridad.

El policía de barrio es alguien destinado siempre a la misma zona, que circulando en una motocicleta en turno de mañana o tarde se preocupa por la vigilancia exclusiva de esa barriada con una presencia casi permanente, lo que hace que el vecindario lo identifique y acabe convirtiéndose en un policía de confianza.

Los profesionales consultados por este medio, no obstante, consideran que detrás de la habilitación de esta figura se encuentran intereses políticos y, aunque creen en su eficacia, no piensan que en el futuro Jerez pueda contar con algo tan reivindicado por las asociaciones vecinales.