MUNDO

La epidemia de cólera causa más de 3.700 muertes en Haití

Unas 800.000 personas sobreviven en campos de refugiados un año después del terremoto que paralizó las infraestructuras

PUERTO PRÍNCIPE. Actualizado: Guardar
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Un año después de la tragedia causada por el terremoto los haitianos continúan luchando por sobrevivir, no solo contra la miseria en la que habitan, sino también contra la epidemia de cólera que desde mediados de octubre ya se ha cobrado la vida de 3.759 personas, mientras que otras 181.000 fueron contagiadas por la enfermedad, según las cifras difundidas ayer por el gobierno.

Estos datos suponen un incremento de 100 personas en el número de fallecidos con respecto a los ofrecidos la semana pasada, pero se espera que la cifra aumente pues el recuento se realizó hasta el 7 de enero. De acuerdo con el Ministerio de Sanidad, entre el 1 y el 7 de enero se registró una media de 17 muertes diarias, la más baja desde el inicio de la epidemia. El 19 de diciembre fue el peor día desde que se conoció la existencia de un brote en el país, con 105 fallecidos, seguido del 27 de diciembre, con 70 muertos. Según el informe, 101.000 de los 181.000 infectados fueron tratados en hospitales del país.

Estos datos se conocen dos días después de que la Organización Mundial de la Salud (OMS) asegurara que la epidemia de cólera no ha llegado todavía a su techo. «Pensamos que no ha alcanzado su punto máximo», explicó la portavoz de la OMS, Fadela Chaib, en Ginebra. «Habrá sin duda muchos más casos de cólera en Haití, eso es evidente», añadió, pero precisó que «morirán menos personas» debido a la respuesta contra la epidemia en este país, el más pobre de América. Chaib informó que la tasa de mortalidad había disminuido sensiblemente en Haití, ubicándose en 2,2% contra un máximo de 9% el pasado otoño.

Sin infraestructuras

La epidemia de cólera no ha hecho más que empeorar la situación que vive Haití, un país en ruinas tras el terremoto del 12 de enero del año pasado, que causó 316.000 muertos, 350.000 heridos y más de 1,5 millones de damnificados. El país sigue sin curar sus heridas.

La economía y las infraestructuras están paralizadas y más de 800.000 personas sobreviven en campos de refugiados. La tarea es gigantesca: hay que terminar de levantar los escombros, reubicar a los sin techo, proteger un medio ambiente degradado y reformular el sistema educativo, que recibe a menos de la mitad de los niños del país.

Los donantes internacionales han prometido cerca de 10.000 millones de dólares hacia 2013 pero solo una fracción fue liberada (1.200 millones), a la espera de que la situación política se estabilice tras la primera vuelta de las elecciones presidenciales el 28 de noviembre.

La Organización de Estados Americanos prepara un informe sobre los recientes comicios presidenciales, en el que recomendará la retirada del candidato oficialista, Jude Celestin, acusado de fraude. La fecha de la segunda vuelta en la que se deberían enfrentar la exprimera dama Mirlande Manigat y el cantante Michel Martelly no ha sido fijada aún.

El pasado lunes, Preval explicó que no podrá entregar el poder el 7 de febrero, como estaba previsto, porque: «No tenemos presidente electo».