MUNDO

Obama visita Luisiana en medio de negras previsiones sobre el vertido

La Casa Blanca se enfrenta a una ola creciente de críticas mientras se desvanecen las posibilidades de una solución rápida

NUEVA YORK. Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Las posibilidades de encontrar una solución rápida para detener el vertido de crudo en el golfo de México se desvanecen con el paso de las horas después de que el equipo de técnicos que trabajan contrarreloj en Houston admitieran ayer que la vía más segura es construir lo que se nomina un pozo de alivio a unos 4,8 kilómetros del fondo oceánico. Su perforación podría llevar unos tres meses. «Nos enfrentamos a un desastre potencialmente catastrófico», declaró ayer el secretario de Energía, Ken Salazar, horas antes que Obama realizara su primera visita a las zonas costeras de Luisiana, el estado más amenazado por la marea negra. En su comparecencia, el presidente trató de insuflar ánimos a las miles de personas que trabajan en los dispositivos desplegados para luchar contra el chapapote a la vez que reafirmó el compromiso del Gobierno federal con los gobernadores de los estados afectados en las duras jornadas que se avecinan.

Mientras la Casa Blanca se enfrenta a una creciente ola de críticas por lo que se considera una reacción lenta a la catástrofe, la Casa Blanca vuelve su ira una y otra vez contra la compañía británica BP por la precaria calidad de sus infraestructuras de seguridad en la plataforma incendiada. En ese sentido, Salazar ratificó que el mecanismo instalado por la petrolera para regular la salida de crudo, y cuyo fallo ha posibilitado el derrame, se hallaba en condiciones «defectuosas». Según los términos establecidos en el contrato explotación, BP debe responsabilizarse de contener el derrame de crudo y de todos los daños que se deriven.

«Nuestro trabajo consiste en poner la bota en el cuello de la BP para que desempeñe las responsabilidades estipuladas tanto por ley como por contrato para que den un paso al frente y detengan este derrame», afirmó Salazar a la CNN.

Según las estimaciones oficiales y de BP, el pozo marino vierte cada día alrededor de 800.000 litros de petróleo al mar. Algunos expertos creen que la estimación es muy baja y calculan que la cifra podría ser cinco veces mayor, unos 4 millones de litros de crudo cada 24 horas. Varios medios recogieron este fin de semana el estudio de Ian MacDonald, profesor de la Universidad de Florida especializado en el seguimiento de las filtraciones de crudo en alta mar utilizando imágenes por satélite. Los resultados revelan que podría haber 34 millones de litros de crudo. El comandante de los Guardacostas estadounidenses, Thad Allen, aseguró que la marea negra no ha afectado a las principales vías de navegación de la zona, por lo que no es necesario restringir el paso de embarcaciones.