Doble rescate de un hombre y una joven que cayeron por dos desfiladeros

La jornada de ayer fue intensa para los bomberos de los parques de la Sierra, que tuvieron que intervenir en dos rescates distintos de dos personas que cayeron al vacío desde alturas considerables, mientras practicaban senderismo.

El primero de los rescates tuvo lugar por la mañana, alrededor del mediodía, en Olvera, en la zona conocida como El Lanchar, donde un hombre de 41 años (J. M. B. F.) se resbaló y se despeñó por una pendiente de difícil acceso. En la caída, el hombre se lesionó gravemente una pierna, por lo que tuvo que ser devuelto a la carretera con sumo cuidado inmovilizado en una camilla, que fue izada por los bomberos con cuerdas y poleas. Hasta la zona se desplazaron efectivos del parque de bomberos de Olvera, agentes de la Guardia Civil y miembros del cuerpo sanitario, que asistieron al herido en la zona. El trabajo de rescate se complicó en los primeros tramos, pero finalmente el hombre pudo ser trasladado en ambulancia al hospital de Villamartín.

Por la tarde, en torno a las 17.00 horas, un nuevo resbalón provocó el segundo accidente de la jornada, que tuvo lugar en el término municipal de Benaocaz, en el paraje conocido como el Mirador del Salto del Cabrero, una escarpada falla con paredes de hasta 80 metros de altura. En este caso, la accidentada fue una chica joven, de nacionalidad francesa que cayó mientras practicaba alpinismo y sufrió heridas en un tobillo, la cabeza y magulladuras. En su ayuda acudió el equipo especial de rescate de montaña, del parque de bomberos de Ubrique, que tras dos horas logró llegar a ella y trasladarla al hospital de Villamartín. Según informaron, se pensó en recurrir en un helicóptero para evacuar a la joven, pero al ser ya de noche se desechó.