LAS CLAVES

Demasiado premio para 'Ibra'

Mario Bermejo tuvo el gol del empate en la segunda mitad y acabó el encuentro con un tanto más en su cuenta particular El delantero sueco del Barça anotó y dio una asistencia tras un mal partido ante el Xerez:: lof

JEREZ. Actualizado: Guardar
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En casos como el de ayer las comparaciones llegan a ser odiosas. La desigualdad existente entre dos entidades como el FC Barcelona y el Xerez Deportivo se traduce en todos los aspectos, deportivos, institucionales y sociales. Sin embargo, como suelen decir los entrenadores, sobre el terreno de juego son once contra once. Mario Bermejo, años después de su debut en Primera División, pisaba el Nou Camp en un duelo de necesidades por ambos bandos. Por su parte, Ibrahimovic recuperaba la titularidad ante el colista y Guardiola dejaba claro que el sueco no estará ante el Inter en la gran final del miércoles. Un toque de atención para un jugador que comenzó el partido andando, literalmente.

Henry y Jeffren eran los encargados de llevar la velocidad del ataque 'culé', mientras que Bermejo se convertía en víctima del cambio de sistema de Gorosito. El delantero cántabro fue el primero en notar la defensa de cinco, pero seguía haciendo su trabajo y tuvo la primera en el minuto 20 en una jugada ensayada. Lamentablemente, Jeffren ya había adelantado a los catalanes y poco después lo hacía Henry, con asistencia de 'Ibra', precisamente. Bermejo no se quedaba atrás y respondió un minuto como él sabe, logrando su gol número once en Liga de fuerte disparo.

Con la segunda parte llegó el cambio de sistema y la oportunidad de Mario de cubrirse de gloria. El cántabro tuvo la ocasión de empatar, pero remató mal con la testa. Ocasión desperdiciada por parte del azulino, pero no por parte del sueco. Pasaba por allí Ibrahimovic y, tras empujar a Prieto, empujó el balón para lograr el tercero y matar el partido. A partir de ahí, el juego xerecista finalizó. Gorosito y Pep movían banquillo, pero la labor de los delanteros seguía siendo la misma. El Barça metió velocidad con un apático Messi y el Xerez lo hizo con un desaparecido Alustiza. Poco fruto para dos jugadores que miraban cómo el tiempo llegaba a su fin en el Camp Nou.