Bachelet y Piñera respaldan un maratón televisivo a favor de las víctimas del seísmo

Una semana después del violento terremoto que sacudió Chile, una fotografía que parecía imposible plasmó ayer la hermandad entre la todavía presidenta socialista, Michelle Bachelet, y quien será su sucesor, el derechista Sebastián Piñera. Ambos se abrazaron emocionados durante el programa de televisión 'Chile ayuda a Chile', una iniciativa solidaria lanzada con la meta de reunir 30 millones de dólares -22 millones de euros- para construir viviendas para los damnificados, al conocer que se había recaudado el doble (44). «Somos el Chile que se levanta y sigue adelante», proclamó ella. «¡Fuerza Chile, que podemos!», animó él.

La mandataria socialista hizo su propia aportación a la campaña de recaudación de fondos en efectivo y fue ovacionada por el público que asistió al llamado Teatro Teletón. Allí, artistas locales y extranjeros cantaron y bailaron. Sus actuaciones se alternaban con testimonios de supervivientes y de personajes anónimos que mostraron su heroísmo en la desgracia mientras crecía sin pausa la cuenta de ayuda.

En Chile es una tradición que el presentador Mario Kreutzberger, más conocido como Don Francisco, lidere las campañas de Teletón en busca de recaudar dinero para hospitales. Pero éste fue un «Teletón extraordinario», como él mismo explicó. Pese a que se organizó con dos días de antelación, logró con creces su cometido. Empresarios, artistas y deportistas desfilaron por el programa para hacer sus donaciones. Algunos se ofrecieron incluso como telefonistas para recibir las llamadas de quienes prefirieron dar su ayuda en secreto.

Banqueros, firmas mineras, empresas de alimentación... Unas grandes y otras no tanto. Todas colaboraron para que la fundación Un Techo para Chile puede construir nuevas viviendas. El objetivo eran 30.000 casas, pero la generosidad de los chilenos permitirá erigir 60.000.

'Himno de la solidaridad'

Bachelet y Piñera participaron en la apertura del maratón televisivo y retornaron veinticuatro horas después para estar presentes en el cómputo final. El cantante argentino Diego Torres interpretó lo que en Chile se conoce como un 'himno de la solidaridad', su tema 'Color esperanza', elegido por el fallecido Papa Juan Pablo II para ser cantado en el Vaticano. Y la angustia y el agotamiento de una semana de tragedia y caos dejó paso a la emoción y a la alegría. La presidenta se abrazó a su sucesor y todos se emocionaron.