Sin pizarras digitales por caras

El desembarco de los ordenadores portátiles para los alumnos de 5º y 6º de Primaria ya es una realidad. Cientos de estudiantes jerezanos van y vienen a sus colegios con las características mochilas verdes de la Junta de Andalucía, tanto de los públicos como de los concertados. La administración autonómica ha repartido los dispositivos por igual entre los estudiantes pero no ocurrirá lo mismo con las pizarras digitales, que sólo irán a los colegios públicos, ya que están consideradas como parte de las infraestructuras educativas.

Como ya aclarara la delegada provincial de Educación, Blanca Alcántara, los colegios concertados pertenecen a la patronal y, por tanto, son ellos los que tienen que hacer las inversiones necesarias para la mejora de las infraestructuras, igual que hacen cuando amplían sus aularios o construyen un gimnasio. No obstante, la ley de educación andaluza recoge medidas de ayuda a estos centros que han concertado la enseñanza que se podrían aplicar a las pizarras digitales y que aún están por determinar.

Los colegios concertados asumen que son ellos los que tienen que pagar las pizarras aunque no todos están en disposición de hacer ahora esa inversión. Es el caso, por ejemplo, del colegio salesiano Oratorio Padre Torres Silva, conocido por Oratorio Festivo: «De momento, no vamos a comprar las pizarras», explicó el director del centro y presidente de la Federación de Religiosos de Enseñanza Católica-Ceca y Educación y Gestión de la provincia de Cádiz, Juan José Jiménez. El gasto por cada pizarra interactiva rondaría los 1.500-1.800 euros (incluyendo instalación en las aulas) por lo que la comunidad salesiana, con 25 colegios en toda Andalucía, ha decidido, por ahora, esperar.

Como mínimo, la inversión de los centros escolares alcanzaría los 3.000 euros puesto que las pizarras son necesarias para las clases de 5º y de 6º. A medida que crece el número de líneas del colegio, hay que incrementar la partida. «Es un gasto imprevisto», continuó el responsable, que apuntó que «los niños no van a venir todos los días con el ordenador sino uno o dos. Sin la pizarra, trabajarán los paquetes educativos en su portátil y ya está. Hay muchos recursos pedagógicos», detalló. En el Oratorio Festivo las familias recibieron los equipos informáticos ayer.

No sería hasta el año que viene cuando la Junta de Andalucía convocara subvenciones para sufragar -no se sabe aún en cuanto porcentaje- los gastos de las pizarras interactivas. «Ahora tendríamos que buscar una financiación que luego podríamos recuperar», dijo Jiménez.

Mientras que todos los alumnos de la concertada han recibido sus portátiles, Educación sólo ha distribuido un ordenador por cada curso de 5º y 6º para los profesores, independientemente del número de líneas.